Durante dos años, el estadounidense Matt Shaha, de 27 años, se dejó crecer el pelo para hacer una peluca para su madre, Melanie, que perdió el cabello durante el tratamiento contra el cáncer.
La idea del joven surgió después de que su madre atravesara la segunda remisión de un cáncer cerebral. En una entrevista con el Today Show, Matt dijo que quería que su madre “se sintiera bienvenida y cómoda”, ya que el tratamiento de radioterapia no es fácil.
La primera vez que Melanie tuvo que enfrentarse el cáncer fue en 2003. Cuando acudió al médico por sus fuertes y frecuentes dolores de cabeza, le diagnosticaron un tumor cerebral benigno.
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Las pruebas encontraron una masa de carne extraña en la hipófisis, una pequeña glándula situada en la base del cerebro que produce hormonas que contribuyen al buen funcionamiento del metabolismo.
El tumor tenía el tamaño de una ciruela y afectaba directamente al funcionamiento de la tiroides de Melanie. “Me operaron para extirpar el tumor y tuve un gran resultado”, dijo la madre de seis hijos al portal Today Show.
Sin embargo, la vida seguía teniendo algunos retos para Melanie. En 2006, el tumor había vuelto a crecer y se sometió a más tratamientos.
Pensando que ya se había librado de la enfermedad de una vez por todas, en 2017 llegó una noticia más devastadora: el tumor había vuelto y requeriría sesiones de radioterapia.
Al principio, Melanie creía que no iba a perder el pelo. De hecho, estaba bien que estuviera enferma, pero no quería parecerlo.
“Le pregunté a mi médico: ‘¿Voy a perder el pelo?’ y me dijeron que no”, recuerda Melanie. “Tres meses después, tenía el pelo largo y de repente empecé a perderlo. Me sorprendió. Cuando pierdes el pelo, destacas entre la multitud. No me importa estar enferma, pero sí parecerlo”, se desahoga.
Para entonces, Matt había terminado la escuela y ya no necesitaba tener un estilo de vida con ciertas limitaciones, como mantener el pelo corto. Entonces, un día en la comida familiar, tuvo una idea:
“Dije: ‘¿Por qué no me dejo crecer el pelo para hacer una peluca para ti?”, dijo Matt. Al principio, Melanie no quería que su hijo lo hiciera sólo para complacerla, después de todo, el pelo tardaría en crecer.
Pero cuando se dio cuenta de que Matt realmente quería hacer algo para que su madre se sintiera mejor, aceptó.
Después de dos años dejando crecer su pelo hasta los hombros, Matt decidió que ya era hora de convertir sus mechones en una peluca.
“Estábamos súper emocionados y cuando empezaron a cortar, lloramos juntos”, recuerda su hijo.
Una vez cortado el pelo, lo enviaron a una empresa especializada en pelucas, Compassionate Creations, en California.
“Fue un placer trabajar con la familia”, dijo la cofundadora de la empresa, Veronica Balch. “Cuando alguien se propone hacer lo que hizo para ayudar a un familiar, hace que lo que hacemos sea aún más especial”, subrayó.
A Melanie le encantó cómo quedó la peluca y su hijo se emocionó al ver la sonrisa de su madre: “El color es espectacular y la cortamos y peinamos con un peluquero. Matt dijo que me quedaba muy bien. Ciertamente, me llenó de emoción”, finalizó la madre.
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Fotos: Today Show / NewerMercedes Berg Photography