La planta conocida como Tulsí es familia de la albahaca que comúnmente conocemos, es originaria del Asia tropical, y se conocen registros milenarios que indican su uso en la medicina ayurvédica. De hecho, los hindúes la llaman “albahaca sagrada” y la consideran un objeto de culto, toda vez que está estrechamente asociada con sus rituales, pues ella simboliza la espiritualidad de la familia.
Tiene una importante presencia en las tradiciones culinarias asiáticas, tales como la tailandesa.
Según algunas fuentes, la albahaca sagrada es considerada parte del grupo de hierbas y plantas adaptógenas. la medicina sistémica entiende por “adaptógenas” aquellas plantas específicas cuyas propiedades les permiten cumplir una función en el rendimiento mental y físico del cuerpo, pues normalizan las funciones fisiológicas.
Esta planta contiene ácido oleanólico, ácido rosmarínico, ácido ursólico, β-cariofileno, carvacrol, eugenol y linalool.
Beneficios del Tulsí o albahaca sagrada
Esta exótica planta trae beneficios a los siguientes aspectos de la salud:
- Acné.
- Fortalece el sistema inmunológico, lo que la hace una aliada especial para el tratamiento del cáncer.
- Tiene propiedades antioxidantes.
- Inhibe la producción de células cancerígenas.
- Controla la diabetes.
- Equilibra la hormona cortisol, relacionada con la diabetes mellitus y el estrés.
Infusión de té tulsí
Ingredientes
- Agua: 1/2 litro.
- Hojas de té tulsí: un puñado.
Preparación y consumo
- Hervir el agua y, una vez que haya alcanzado el punto de ebullición, apagar el fuego e incorporar las hojas de té tulsí.
- Tapar y dejar reposar por unos 10 minutos.
- Tomar inmediatamente.
- Se recomienda tomar 1 taza al día.