Aquellos que sufren de estrés y ansiedad saben lo difícil que es relajarse y hasta dormir, principalmente cuando late la inquietud que hace que el cerebro se acelere a 1.000 por hora. Los tés calmantes son una solución natural a estos problemas.
5 Opciones de tés calmantes
Hecho de hierbas cuyos compuestos brindan una sensación de bienestar y tranquilidad, los tés que te ayudan a relajarte son una excelente opción para la vida cotidiana, principalmente si prefiere una solución natural en lugar de remedios.
A seguir, conoce unas deliciosas opciones de infusiones que te harán muy bien.
Té de manzanilla
¿Estás nervioso? Toma té de manzanilla. Esta hierba es conocida por su acción calmante, pero también es rica en flavonoides con acción antiinflamatoria y antioxidante, que previene el envejecimiento prematuro, el cáncer y el Alzheimer. Estos beneficios también te ayudan a estar más tranquilo, ¿a que sí?
Té de melisa
Si no tienes sueño o si tus pensamientos no te permiten dormir, intenta preparar té con 2 cucharadas de melisa y 1 taza de agua hirviendo. Listo: tendrás un somnífero para dormir natural, que también reducirá tu ansiedad y mejorará la calidad de tu sueño.
Té de hierba de limón
Además del delicioso olor, la hierba de limón todavía tiene propiedades calmantes y antidepresivas, y es muy recomendable para los dolores de cabeza, ya que tiene poder analgésico. Lo mejor de todo es que también es diurético, o sea, un amigo de la dieta.
Té de limoncillo
En exceso, el té de limoncillo causa irritación gástrica, pero en la dosis correcta calma, relaja y mejora la calidad del sueño. Igualmente, también alivia los calambres menstruales, gases y dolores de cabeza.
Té de hoja de maracuyá
No se puede hablar de tés calmantes sin hablar del remedio casero más tradicional para tranquilizar. La fruta, además de relajarte, causa somnolencia y proporciona una muy buena noche de sueño. Pero ten cuidado, ya que no debe combinarse con remedios sedantes.
Otros consejos para combatir la ansiedad
Combinar la ingesta de tés calmantes con otros hábitos puede ayudar a reducir el estrés y la ansiedad del día a día. Aquí hay algunos consejos que pueden ayudarte:
- Practica actividades físicas para aumentar la producción de serotonina, una hormona del bienestar, y liberadora de estrés;
- Tómate un momento para pensar qué es lo que te pone ansioso y qué pasos puedes tomar para mejorar;
- Apuesta por tratamientos alternativos, como la homeopatía y las flores de Bach;
- Invierte en control mental a través de ejercicios como el yoga y la meditación;
- Controla tu respiración, inspirando lentamente por la nariz con la boca cerrada y expulsando el aire por la boca;
- Organiza tu rutina, porque aquellos que están ansiosos tienen miedo de lo que está por venir, y al prepararse evitan (o al menos minimizan) el riesgo de eventos imprevistos;
- Cuídate y tómate un momento para ti todos los días.
Recuerda que los datos de este artículo no remplazan a la opinión de un médico. Además, cada organismo es distinto y puede reaccionar de manera diferente a la mencionada. Por lo tanto, lo mejor es que consultes con tu doctor de confianza qué infusión puedes añadir a tu rutina, dependiendo de tu cuadro clínico.