El tamarindo es un caso particular en el mundo de la botánica ya que está clasificado simultáneamente como una legumbre y un fruto. Su apariencia tampoco es regular con su distinta vaina. Sin embargo, su distinción no se queda solamente en la superficie dado que éste es uno de los frutos más utilizados en algunas gastronomías mundiales.
¿Qué es el tamarindo?
El tamarindo es una legumbre originalmente de África cuyo cultivo se ha extendido a otras regiones calientes del planeta, principalmente el Caribe, Asia y México. El fruto crece en las pequeñas conchas en lo alto del árbol con el mismo nombre. Éstas son las que le dan su apariencia distinta.
Dentro de la corteza se encuentra la carne del fruto, con una textura pulposa y las semillas de este alimento, muy similar al frijol a primera vista.
¿Cuáles son las propiedades del tamarindo?
El tamarindo tiene un sabor muy ácido cuando está joven y dulce cuando madura. Por esta diferencia de gustos en un solo fruto, es bastante utilizado como ingrediente o como condimento en la elaboración de diversos platos principales y postres. Se destaca, en particular, en salsas agridulces por razones obvias.
Además de su sabor peculiar, el tamarindo también aporta muchos nutrientes a las recetas. Entre su contenido nutricional están las vitaminas A, E, C, B1 y B2, bien como minerales como el fosforo, magnesio y calcio.
Este fruto contiene, también, fibras solubles e insolubles que aportan una sensación de saciedad prolongada, además de promover el buen funcionamiento intestinal y digestivo. Por estas propiedades y por su bajo contenido calórico, el tamarindo es frecuentemente utilizado como un apoyo a la pérdida de peso.
Recetas sanas con tamarindo
¿Este fruto ha despertado tu curiosidad? A probarlo, entonces. A continuación encontrarás tres recetas muy diferentes entre sí pero todas basadas en el uso de tamarindo. Así, podrás experimentar su versatilidad además de su sabor.
Pollo en salsa de tamarindo
Ingredientes
- Filete de pechuga: 4 unidades;
- Tamarindo: 10 unidades;
- Salda de tomate: 100 ml.;
- Agua: 400 ml.;
- Sal: 1 pizca;
- Pimienta: 1 pizca;
- Aceite de oliva: 1 chorrito.
Modo de preparación
1. Hierve el agua y, mientras tanto, limpia los tamarindos. Cuando el agua cuando esté calentada y, entonces, remoja los tamarindos durante 5 minutos.
2. En seguida, retira los frutos del agua y machácalos bien para crear una pasta.
3. En un bol, combina la pasta del fruto con la salsa de tomate y reserva el preparado.
4. Salpimienta los filetes de pollo y fríelos en una sartén con el chorrito de aceite de oliva.
5. Cuando el pollo esté bien cocido en todos los lados, adiciona la salsa de tomate y tamarindo y revuelve.
6. Deja que el pollo siga cociéndose en la salda durante 15 minutos más. Remueve, ocasionalmente, para evitar que la salsa se pegue a la sartén y ¡listo!
Dependiendo de adonde vives, no siempre es fácil encontrar tamarindos frescos para preparar la receta. Como alternativa, puedes usar pulpa de tamarindo comprada y pasar directamente al paso
Agua de tamarindo para adelgazar
Ingredientes
- Tamarindos: 200 gramos (aprox. 15 unidades), secos y pelados;
- Agua: 2 litros;
- Sal: 1 pizca;
- Edulcorante: al gusto (opcional).
Modo de preparación
1. Pela y lava muy bien los tamarindos.
2. Hierve 1 litro de agua y agrega los frutos ya limpiados. Vuelve a hervir el agua entre 15 y 20 minutos para que la pulpa del fruto empiece a soltarse con el calor. Reserva el preparado hasta que se enfríe.
3. Con un machacador de frijoles o con un tenedor, empieza a chafar los tamarindos ya enfriados en el agua. Aprovecha para retirar las semillas de la pulpa si todavía no lo has hecho.
4. Añade la pizca de sal y edulcorante, si lo utilizas, y licúa todo el preparado.
5. Cola la bebida y agrega el restante agua. Puedes agregar más o menos agua en este punto, dependiendo del espesor que prefieras. Sirve la bebida bien fría o con hielo.
Jugo de tamarindo
Ingredientes
- Pulpa de tamarindo: 2 tazas;
- Azúcar: 1 taza;
- Agua: 10 tazas;
- Hielo: al gusto.
Modo de preparación
1. En una licuadora, agrega la pulpa del fruto y el agua y mezcla todo muy bien durante 5 minutos a velocidad mediana.
2. Cola el preparado para un recipiente. Si lo deseas y lo crees necesario, puedes volver a licuar el líquido.
3. Añade el azúcar y revuelve bien durante 2 o 3 minutos con la ayuda de una batidora.
4. Reserva el jugo en el refrigerador para que se enfríe o sírvelo de inmediato con hielo.
Consejo extra
Una de las principales dificultades para disfrutar de este fruto y usarlo en recetas son sus huesitos. Puedes pelar el tamarindo e intentar cortar la pulpa para que suelte las semillas, pero el proceso suele ser difícil. Lo ideal es siempre remojar el fruto pelado para ablandar la pulpa.
Y por si necesitas más razones además de su sabor para agregar este fruto a tu dieta, conoce en el video a continuación algunos de los beneficios de este fruto.
