La neumonía es una enfermedad contagiosa que puede transmitirse por bacterias, virus u hongos. La misma provoca inflamación en el pulmón y acumulación de líquido en los alvéolos pulmonares, los cuales no pueden realizar el intercambio de gases necesario para la respiración. Si se diagnostica que la dolencia está afectando a diferentes partes de los pulmones, se llama bronconeumonía. Estar atento a los síntomas de la neumonía es fundamental para descubrirla lo antes posible.
Principales síntomas de la neumonía
Todas las personas infectadas con esta enfermedad no sienten los síntomas de la misma manera. En ocasiones, estos son graduales y lentos, mientras que en otras son repentinos. No obstante, por lo general se manifiestan cuando el cuerpo está más débil, con un sistema inmunológico poco fortalecido.
Fiebre alta
La fiebre de la neumonía es mayor de 37.8 grados. Aun así, si hay fiebre recurrente junto con otros síntomas, se debe prestar atención.
Dificultad para respirar
La dificultad para respirar o la falta de aliento también es otro síntoma ya que los alvéolos pulmonares empiezan a llenarse de líquido.
Tos
El tipo de tos en la neumonía varía según su gravedad. Puede ser una tos seca, una tos verdosa o con sangre.
Dolor de cabeza
Si sufres un dolor de cabeza constante y experimentas otros síntomas al mismo tiempo, busca atención médica de inmediato.
Sudores nocturnos
Debido a la fiebre, incluso cuando es baja, es común despertarse sintiéndose mojado. Ducharse no sólo ayuda a volver a la temperatura normal, sino que también calma y hace que la persona se sienta un poco mejor.
Dolor en el pecho
Debido a que los pulmones son atacados, el dolor en el pecho es uno de los principales síntomas de la neumonía.
Dolores musculares y fatiga
El desequilibrio en la distribución de oxígeno en todo el cuerpo es causado por la dificultad para respirar. Por eso, el enfermo se sentirá cansado todo el rato y con dolor muscular, a pesar de que no hacer esfuerzo.
¿Cuándo se debe visitar a un médico?
Debes visitar al neumólogo tan pronto como notes alguno de los síntomas. Dado que la enfermedad es contagiosa, ten cuidado de no compartir ningún objeto personal, mantener la casa bien ventilada y desinfectada. Asimismo, debes evitar salir ya sea para trabajar o estudiar dado que puedes infectar a otros.
¿Cómo se realiza el diagnóstico?
En la consulta el médico hará algunas preguntas para conocer el historial clínico del paciente y los síntomas que viene sintiendo.
Entre los exámenes que se pueden realizar para poder diagnosticar la enfermedad se incluyen la radiografía de tórax, la tomografía computarizada, la recolección de líquido pleural y la broncoscopia, según sea necesario en cada caso.
Como en la mayoría de los casos la enfermedad es causada por bacterias, el tratamiento se suele realizar con antibióticos y con otros medicamentos para aliviar los síntomas. Sólo en casos severos se necesita hospitalización.