La sal del Himalaya es una sal mineral que se considera una variante de la sal común. Ésta es original de las montañas de Pakistán y en las últimas décadas ha ido ganado peso en Australia, Estados Unidos y en algunos países de Europa. Una de las particularidades de esta sazón es su tonalidad rosada y que se muele antes de ingerirla porque es una sal cristalizada.
Beneficios de la sal del Himalaya
Esta sal es la más pura porque es la que menos contaminantes presenta. Es por ello que se perfila como una buena alternativa saludable a la sal común. Pero ésta no sólo se puede emplear a nivel gastronómico. Gracias a sus propiedades también tiene usos terapéuticos.
Combate los problemas respiratorios
Gracias a las propiedades antiinflamatorias y antibacterianas, esta sal se puede emplear para reducir el nivel de hipersensibilidad del organismo mejorando así los problemas respiratorios.
Mejora al digestión
Incluir la sal del Himalaya en las comidas ayuda a tener una mejor digestión. Asimismo, es recomendable para estabilizar la acidez estomacal y a mejorar la fabricación de fluidos digestivos del páncreas y del hígado.
Induce a un sueño reparador
Debido a que esta sal es rica en contenido mineral, consumirla puede incitar a que tengas un buen descanso.
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Calma los dolores musculares
Tomar baños con esta sal ayuda a calmar y prevenir los dolores musculares gracias a los oligoelementos que presenta. Dichos nutrientes permiten que los músculos que están contraídos se aflojen, lo que provoca que el riego sanguíneo tenga lugar con normalidad.
Equilibra el pH
También gracias a los minerales que contiene, este ingrediente estabiliza el nivel del pH en el organismo. De la misma manera, esta propiedad puede incrementar la inmunidad.
Conoce los beneficios de las lámparas de sal del Himalaya.
Trata el acné
Otro de los beneficios de esta sal es que se puede aplicar para tratar el acné al reactivar la dermis por su efecto desintoxicante y exfoliante.
Incrementa la energía
El hecho de aumentar la energía tanto física como mental es otro de los puntos a favor de este producto. Esto se debe a que aporta electrolitos y antioxidantes.
Combate la formación de várices
Realizar ciertos ejercicios ayuda a combatir las várices. Consumir sal del Himalaya también gracias a su poder antiinflamatorio y relajante.
Contraindicaciones
A pesar de los beneficios que tiene, no es bueno exceder el consumo de la sal debido a que dicha acción podría tener efectos secundarios sobre el organismo.
Por un lado, podría ser contraproducente para las personas que tengan problemas de riñón.
Por otro lado, también podría provocar un incremento de la tensión.
Diferencias entre la sal de mesa y la del Himalaya
Aunque ambas se emplean para sazonar la comida, no son iguales.
En lo que respecta a la sal común, está pasa por un proceso químico que provoca que no sea más un nutriente y que presente el 96 o 97% de cloruro sódico. Por su parte, la del Himalaya posee 84 elementos esenciales que sí que son buenos para el cuerpo como el magnesio, el hierro o el potasio.
Otra diferencia entre la sal de mesa y al del Himalaya es que la primera hace que las personas se hinchen y tienen efecto negativo sobre algunos órganos. Un ejemplo muy claro es que la sal puede causar retención de líquidos. En contrapartida, la del Himalaya ayuda a reducir dicho problema. Asimismo, mejora la circulación.
Consejo final:
A pesar de que es mejor que la sal de mesa, es aconsejable consultar a un especialista cuál es la cantidad diaria que se debería ingerir de esta sazón.
Para finalizar, en el siguiente vídeo podrás conocer los beneficios de las lámparas hechas con la sal procedente de Pakistán.