El auge de la cirugía estética ha hecho que muchas personas se hayan sometido a diferentes tratamientos. Para estilizar la figura, una de las más recurrentes es la liposucción o lipoescultura. Esta sirve para eliminar la grasa acumulada en distintas partes del cuerpo. A pesar de que sirve para acabar con depósitos grasos que no se pueden deshacer con el deporte y la alimentación saludable, hay que tener en cuenta los riesgos de la liposucción.
Cuáles son los riesgos de la liposucción
Antes de someterte a cualquier tratamiento estético, debes saber los pros y los contras de estos. Por muy bueno que sea, puede tener efectos secundarios, los cuales pueden variar dependiendo de la condición médica de la persona.
Infección
Uno de los posibles riesgos de la liposucción es el de sufrir una infección. Aunque no es habitual que ocurra, se debe tener cuidado y seguir las curas y recomendaciones del médico a raja tabla. En caso de infección, los médicos suelen recetar algunos antibióticos y existen casos en los que ha sido necesaria una intervención.
Sangrado
La lipoescultura puede provocar hemorragias mientras se está realizando y posteriormente. Si el sangrado tiene lugar después, es aconsejable acudir a urgencias para que puedan extraer el fluido acumulado. La sangre almacenada debajo de la piel puede perjudicar la sanación.
Cicatrización
Otro de los riesgos de la liposucción es que pueden existir problemas de cicatrización, tanto en los tejidos profundos como en la dermis. No obstante, esto no suele ocurrir.
Sensibilidad cutánea
Debido al tratamiento, la piel puede estar más sensible de lo normal, sobre todo las primeras semanas después de la liposucción.
Problemas pulmonares
Una de las dificultades pulmonares que pueden pasar tras esta cirugía es el síndrome de embolismo graso. Este tiene lugar cuando se alcanzan gotas de grasa en los pulmones.
Otro de los problemas pueden ser una embolia grasa.
Alergias
Este tratamiento de estética puede generar alergias en los pacientes. Estas suelen ser a alguno de los materiales que se emplean en el proceso de curas y cicatrización. Asimismo, se pueden dar alergias sistémicas por causa de algún fármaco.
Seroma
Un seroma es el resultado de la acumulación de los fluidos corporales en una parte del cuerpo donde ha habido una eliminación del tejido por medio de una intervención. Si tras una liposucción esto ocurre, puede que sea necesaria una operación para drenar el líquido acumulado.
Asimetría
Otro de los riesgos de la liposucción es la posibilidad de que el cuerpo quede asimétrico. Ya sea el tono muscular, la tonalidad de la piel o las prominencias óseas puede que no queden iguales.
Consejo final:
A pesar de los riesgos mencionados, la liposucción suele ser una técnica muy segura. Eso sí, es fundamental que la realices en un centro homologado y con todas las garantías de sanidad. Por ahorrar, algunas personas no se han puesto en manos de profesionales y el resultado ha sido nefasto.
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Para finalizar, en el siguiente vídeo podrás conocer los distintos tipos de liposucción que existen.