¿Ya no es la relación tan encantadora que era antes? ¿No tienes el mismo deseo de estar con tu pareja o lo sientes de esta? Cuando la relación es monótona es el momento de parar y pensar: puedes tener una conversación franca, puedes hacerlo en una terapia de pareja o puedes terminarla y que cada uno siga su propio camino. Descubre si te identificas con estos signos de una relación monótona y toma una actitud para cambiar esto.
1. No sentir más interés sexual por la pareja
Este es un tema bastante delicado, ya que la mayoría de las relaciones necesitan sexo para que se mantengan interesantes. Por supuesto, el sexo no es lo único que importa y no tiene por qué suceder todos los días. Incluso muchas parejas viven felices y sin tener sexo. Sin embargo, si sientes que este no es el caso y te gustaría tener relaciones íntimas, pero con otra persona, esta es una pregunta seria sobre la que debes reflexionar.
2. Falta de admiración por la pareja
Estar en una relación solo tiene sentido cuando sientes admiración y respeto por la persona que está a tu lado. Es esta admiración y respeto lo que despierta pasión, deseo y amor. Si ya no sientes admiración por tu pareja, o quizás nunca la hayas sentido, es posible que estés perdiendo el tiempo conociendo a alguien que hará que tu corazón lata más rápido, tus ojos brillen y las mariposas vuelen a volar en tu estómago.
3. Discusiones frecuentes
Las peleas frecuentes erosionan cualquier relación, especialmente cuando hay una falta de respeto por el otro y tienen lugar muchas ofensas y acusaciones. O la pareja es lo suficientemente madura como para comprender las razones de las discusiones y resolverlas, o no hay forma de continuar. Si falta madurez, pero existe el deseo de que funcione, buscar la ayuda de un profesional, como un terapeuta de pareja, puede ser la solución.
4. Dependencia de la compañía del otro
Si ambos se esfuerzan por estar juntos todo el tiempo, les encanta estar en la compañía del otro y no dejan de hacer cosas solos, óptimo. Pero, si solo a un lado le gusta, mientras que al otro le agradaría ser más independiente, no funciona. Hablar de ello con la persona que depende de la relación es la mejor opción. No obstante, se debe tener cuidado con las palabras para que comprenda que seguirá siendo amado/a y deseado/a, incluso si pasáis unos momentos separados.
5. Falta de empatía
La empatía es la capacidad de ponerse en el lugar del otro y comprender que él siente el mundo de manera diferente a la tuya. Aunque seáis pareja, la relación está formada por dos personas que tienen gustos, deseos y perspectivas diferentes sobre muchas cosas. Cuando no existe tal empatía, las peleas ocurren por razones cada vez más tontas, aquí empieza el desgaste y la pérdida de admiración. No tienes ninguna razón para continuar, a menos que una buena conversación produzca un gran cambio.
6. Falta de sintonía
La sintonía es lo que te atrae de la persona, incluso cuando se tienen muchas diferencias. ¿Sabes eso que dicen que los opuestos se atraen? Bueno, la sintonía es la atracción de estos opuestos, y eso es genial, porque se complementan entre sí.
La sintonía existe cuando también hay empatía, ya que ambos entienden que son diferentes y usan estas diferencias para aprender el uno del otro. Con el tiempo, disfrutan de las mismas cosas y crean cosas nuevas para hacer juntos. Si eso ya no existe o nunca existió en tu relación, parece que no tiene sentido que continuéis juntos.
7. Rechazo
Cuando uno de los individuos de la relación es constantemente rechazado por el otro, permaneciendo siempre en un segundo plano, no hay nada que discutir: falta de pasión y falta de amor. Cuando quieres estar con una persona, simplemente te las arreglas, porque esa es tu prioridad. Si sientes que estás en segundo plano en la vida de tu pareja, ten respeto por tu persona y aléjate de esa relación. Si eres la persona que rechaza, porque prefieres hacer otras cosas en lugar de estar con tu pareja, ten la decencia de acabar la relación.
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