Las plantas siempre han sido la fuente de salud y cura para el ser humano, incluso en momentos en que no se disponía de la medicina tan avanzada. Tés, infusiones, zumos, sopas, cataplasmas y maceraciones eran comunes. Y sí, curaban la mayoría de los problemas que presentaban las sociedades.
Pero, a medida que la sociedad fue evolucionando, también lo hicieron los agentes que desencadenaron las dolencias. Aliado a esto, vino el crecimiento de la medicina, incluidas las farmacias y laboratorios.
La facilidad y seguridad de los fármacos industrializados acabó llevando al olvido a las soluciones naturales. Por mucho que no puedan tratar algunas dolencias modernas, siguen siendo muy buenas para el cuerpo y pueden ayudar en la curar de simples problemas. Conoce a algunos.
Cómo usar plantas para la salud
Mira algunos problemas simples con los que puedes lidiar fácilmente con remedios naturales que, probablemente, sean bastante asequibles. Si no estás en casa, puedes comprarlos fácilmente en el mercado o en la feria. Si vas a comprar las hojas, recuerda siempre comprar productos de un vendedor acreditado o de una tienda de alimentos naturales.
1. Diarrea
Para aliviar los efectos de la diarrea y, además, para calmar problemas como la acidez estomacal y el mareo, puedes utilizar el té de laurel. Este no es como los medicamentos que impiden la eliminación de heces, pero ayudará a reducir los cólicos y los viajes al baño. El té puro se puede tomar o incluso poner una buena cantidad en una sopa de arroz. Descubre cómo preparar el té.
Ingredientes
- Hojas de laurel: 4 unidades;
- Agua: 1 litro.
Modo de preparación:
1. Cocina las hojas de laurel en una sartén con agua.
2. Una vez que empiece a hervir, cuenta 5 minutos y apaga el fuego.
3. Tapa la sartén y deja reposar durante 10 minutos.
4. Cuela y sirve.
2. Cistitis
Una enfermedad que afecta a mujeres, hombres e incluso a los niños, la cistitis puede tratarse fácilmente en casa con té de perejil si esta se encuentra en una fase temprana y no es reincidente. Por supuesto, debes combinar mejores hábitos de salud como beber más agua e ir al baño cuando tengas ganas. Este té se puede ir tomando para ir calmando los síntomas si tienes que esperar para ir ver a un médico.
Ingredientes
- Perejil fresco: 2 cucharadas soperas;
- Agua: 1 taza.
Modo de preparación:
1. Pon el perejil en el agua y llévalo al fuego.
2. Una vez que hierva, espera 3 minutos y luego apaga el fuego.
3. Tapa y deja entibiar.
4. Cuela y toma. Si lo deseas, puedes agregar un trozo de jengibre u otros tés para darle más sabor.
3. Gripe y resfriado
Además de calmar y ayudar a expulsar la secreción, el té de eucalipto ayuda a tratar el asma. Durante los ataques alérgicos, este ayuda a reducir la cantidad de histaminas en el cuerpo, haciendo que la alergia sea más leve. Aprende a prepararlo.
Ingredientes
- Hojas frescas de eucalipto: 1 cucharada sopera;
- Agua: 2 tazas.
Modo de preparación:
1. Escoge hojas frescas de la especie de eucalipto correcta.
2. Lava y picar bruscamente.
3. Pon 2 tazas de agua a hervir y adiciona las hojas.
4. Tan pronto como hierva, apaga el fuego y tapa la cacerola.
5. Cuando esté templado, cuela y bebe.
4. Dolores articulares y musculares
Si experimentas dolor en las articulaciones, ya estás haciendo un tratamiento, pero no deseas obstruirte con analgésicos, prueba la cataplasma de jengibre. Además de antiinflamatorio, ayuda a anestesiar, reduciendo el dolor. También sirve para los dolores musculares para esos días de trabajo más duros.
Ingredientes
- Jengibre fresco rallado: 2 cucharadas soperas;
- Aceite de coco: 2 cucharadas soperas;
- Vendaje de tela de algodón: lo que sea necesario.
Modo de preparación:
1. Ralla el jengibre sin la corteza y añade el aceite de coco.
2. Aplica sobre la región dolorida, masajea y envuelve con una vendaje o tela de algodón.
3. Deja durante una hora y luego lavar bien en seguida.
5. Caspa
Si tienes caspa, ¿qué tal si usas un antifúngico natural? Prueba el aloe vera, el cual cicatriza, reduce es escozor y elimina el hongo que causa la caspa.
Ingredientes
- Aloe vera: ½ hoja;
- Aceite de coco: 1 cucharada sopera.
Modo de preparación:
1. Lava la hoja y retira el gel del interior con una cuchara.
2. Bate en la licuadora con el aceite de coco hasta formar un líquido viscoso.
3. Aplica sobre el cabello, masajeando bien el cuero cabelludo.
4. Dejar actuar durante 1 hora y luego lava en seguida.
5. Haz esto dos veces por semana hasta que desaparezca la caspa.