Kari Falla, quien vive en Seminole County, en La Florida, y es la propietaria de una peluquería canina. Kari tiene como costumbre ayudar a quien puede, desde aquello que sabe hacer, sin detenerse a pensar mucho en consideraciones económicas ni de otro tipo.
Un día, estaba navegando en Facebook, cuando se enteró del caso de un perrito que fue hallado en el medio de la carretera, y al que le pusieron por nombre Lucky. Este perrito lucía en la foto en un estado deplorable, lleno de pelo que no era solamente largo, sino enmarañado a tal punto que se hacían bolas auténticas de pelo.
Cuando Kari lo vio, decidió ponerse en acción y pedir que le dieran acceso a él para hacerle los cuidados de peluquería canina necesarios.
Pero verlo en persona era descubrir cosas peores. Lucky estaba muy mal de salud. Su olor, según el testimonio de Kari, era como de perro muerto. No podía separar las hebras del pelo ni nada.
Así, en plena noche, se puso en la minuciosa labor de cortarte aquella “lana” al pobre Lucky para poder, luego, llevarlo al veterinario y ponerlo en adopción.
La situación era tan grave, que a Kari le tomó cerca de tres horas poder limpiar toda aquella madeja de pelos interminable. Lo interesante fue que el perro, durante todo el proceso, no se resistió a sus cuidados, no ladró y no aulló.
Su imagen quedó completamente irreconocible. Lucky se veía ahora como un perro normal. Aunque Kari, con la ayuda del médico, descubrió que Lucky se había quedado ciego y sordo, probablemente por alguna infección antigua. Aun así, Lucky fue dado en adopción y halló un hogar donde vivir.
En este vídeo, usted podrá saber más sobre la historia de este lindo perrito:
