El cuerpo de una mujer es muy sensible, por eso merece una atención y unos cuidados especiales. Esto incluye ir al ginecólogo, como mínimo, una vez al año para ver si el sistema reproductivo y la salud, en general, están bien. Una de las formas más simples y comunes de hacer esto es a través de una prueba de Papanicolaou, también llamada citología cervicovaginal. Conoce qué es y cómo funciona.
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¿Qué es el examen de Papanicolaou?
El examen de Papanicolaou o colpocitología se lo deben hacer, al menos, una vez al año las mujeres sexualmente activas. Se recomienda que se realice en mujeres de 25 a 64 años. No obstante, en cuanto la mujer empieza a tener relaciones sexuales, deberá consultar a un ginecólogo para que decida sobre la realización de la prueba.
Para qué sirve
El examen no representa ningún riesgo para la mujer. Es más, por el contrario, es fundamental ayudar con el cuidado de la salud, puesto que ayuda en la detección precoz de enfermedades que pueden tratarse rápidamente, aumentando las posibilidades de curación.
La colpocitología permite detectar el cáncer de cuello uterino, además de poder detectar infecciones vaginales y enfermedades de transmisión sexual.
El examen de Papanicolaou no es específico para detectar el VPH, sin embargo, si la mujer está infectada por el virus, detectará alguna anomalía en las células de la vagina y el ginecólogo pedirá pruebas adicionales para detectar la presencia del VPH.
Cómo se hace
Toda mujer que haya visitado a un ginecólogo y se haya sometido a una evaluación física tiene una idea de cómo funcionan las pruebas de Papanicolaou. Pero en caso de que no lo sepas, se hace de la siguiente manera:
1. La mujer llega al consultorio y la consulta comienza con una conversación.
2. En el momento de la prueba, la mujer va al baño dentro de la consulta para quitarse toda la ropa y ponerse un delantal que ya estará adentro.
3. Luego se acuesta en la camilla y el médico la orientará sobre la posición de las piernas para que él pueda realizar la prueba de Papanicolaou.
4. El médico tomará un dispositivo llamado espéculo y lo introducirá en la vagina de la mujer para abrir un pequeño espacio donde podrá ver el cuello uterino;
5. Después de esta evaluación visual, usará una pequeña espátula estéril, que debe abrirse frente a la mujer, y luego introducirla en la vagina. Con esta espátula recogerá una pequeña porción del moco interno para mandarlo al laboratorio.
6. Después de esta parte (o antes) el médico hará una valoración rápida de los senos de la mujer y listo, ella podrá volver a ponerse la ropa.
7. Después de unos días, cuando lleguen los resultados de la prueba, el médico llamará a la mujer si presenta alguna anomalía. Si todo está bien, no llamará y esperará hasta el próximo año para el próximo examen.
¿La citología cervicovaginal duele?
Se puede decir que el examen causa algunas molestias cuando el médico inserta el dispositivo para abrir la vagina y el colector de material en el interior. A pesar de ello, es muy rápido, a penas lleva unos segundos. Aparte de eso, no hay dolor ni malestar.
Cómo es la preparación
No se recomienda realizar la prueba durante el período menstrual, por lo tanto, antes de programar la prueba, la mujer debe tener cuidado de mirar cuando está menstruando. Además, la mujer debe tener algunas otras precauciones 48 horas antes de hacerla:
- No se debe usar cremas u otros productos vaginales;
- No se debe hacer un lavado de la vagina internamente;
- No conviene realizar otras pruebas ginecológicas;
- No debes tener relaciones sexuales;
- No hay necesidad de preocuparse por la depilación.
Si la mujer es virgen pero tiene la edad para hacerse la prueba, debe concertar una cita con el ginecólogo. No hay que tener miedo, ya que el método de recolección de colpocitología es diferente y no hay riesgo de rotura del himen, ya que la recolección se realiza con una especie de cotonete de algodón, más superficialmente.