La espelta es un cereal que tiene una antigüedad de más de 7 mil años. Eso quiere decir que la espelta nos ha acompañado desde tiempos antiguos, pero debido al hecho de que el trigo solía ser más rendidor, fue dejada de lado por los productores y nos acostumbramos al tradicional pan de trigo. Sin embargo, la espelta es un cereal del que se puede hacer harina para fabricar pan.
Los beneficios de la espelta son mucho más visibles que los del trigo, razón por la cual ha vuelto a llamar la atención y hoy en día se ha comercializado. De hecho, la espelta ha ganado credibilidad como una alternativa al pan tradicional de harina de trigo, ya que su harina tiene más y mejores propiedades.
Beneficios de la harina de espelta
Entre las propiedades de la harina de espelta podemos mencionar: un mayor valor proteico respecto de la de trigo y, por ende, posee menos calorías. Asimismo, la harina de espelta es rica en fibras que ayudan al sistema digestivo, contiene triptófano, una sustancia que eleva el estado anímico, es fuente de vitaminas del grupo B y vitamina E. Además, la estructura del gluten en la espelta es más frágil que en el trigo, lo cual resulta aun más beneficioso.
Receta de pan de espelta
Gracias a su comercialización, usted pude adquirir harina de espelta en los supermercados y tiendas naturistas, así que con estas ventajas es hora de aprender a hacer pan de espelta.
Ingredientes
- Harina de espelta integral: 600 gramos;
- Levadura fresca: 50 gramos;
- Agua: 350 mililitros;
- Sal: 1 cucharadita;
- Azúcar: una pizca, opcional,
- Aceite de oliva extravirgen: 1 cucharadita.
Preparación
1. Disuelva la levadura en el agua, la cual debe estar apenas tibia (a unos 37º C de temperatura) y una vez disuelta déjela reposar hasta que se active y haga espuma.
2. En un bol suficientemente grande para amasar, incorpore la harina, la sal y el azúcar. Una vez mezclados, incorpore el agua con la levadura disuelta.
3. Amase en la amasadora eléctrica por unos 8 o 10 minutos. Si lo hace a mano, deberá dedicarle más tiempo al amasado.
4. Cuando la masa ya esté lista, se retira, se hace una bola con ella y, en un bol previamente engrasado con el aceite de oliva, se pone a reposar para que fermente por una hora. El bol debe reservarse tapado y resguardado en un lugar cálido.
5. Al pasar la hora, extienda la masa sobre una superficie enharinada y vuelva a amasar para darle forma.
6. Espolvoree con harina la superficie cada cierto tiempo para evitar que se pegue la masa.
7. Haga la forma que desee con la masa y déjela reposar unos 30 minutos más.
8. Entre tanto, precaliente el horno a 200º C.
9. Lleve el pan de espelta al horno por una media hora y al retirar deje enfriar sobre una rejilla.
Consejos finales
Puede rociar el horno con un poco de agua para crear vapor y favorecer que la concha quede más crujiente. Además, una manera de saber si está listo el pan es darle un leve golpecito sobre la superficie con los nudillos. Cuando suene hueco, es el momento de retirarlo.
Si quiere conocer más sobre las propiedades de la espelta para la salud consulte el siguiente vídeo: