La vesícula, o vesícula biliar es un órgano que se halla debajo del hígado. La función de este es almacenar la bilis, la cual, posteriormente, el organismo utiliza para digerir las grasas en el intestino delgado. Cuando se toma la decisión de extirparla es para tratar los cálculos biliares. Si estás operado de la vesícula, ¿sabes bien qué es lo que puedes comer y lo que no?
¿Estás operado de la vesícula? Descubre qué alimentos puedes ingerir y cuáles no
Colecistectomía, operación quirúrgica de vesícula o laparoscopia. Por desgracia, cada vez son más los individuos que tienen que meterse en un quirófano y someterse a una de estas intervenciones dado que su vesícula biliar no funciona correctamente.
Tras la cirugía, es fundamental que el paciente siga unas pautas alimenticias, basadas en un régimen saludable y balanceado que esté en consonancia al nuevo estado físico de su organismo. De lo contrario, el proceso digestivo del paciente se puede ver gravemente afectado.
¿Estás operado de la vesícula y no sabes qué alimentos puedes incluir en tu dieta? Entonces, sigue leyendo para descubrirlo.
Debes tener en cuenta que, además de los ingredientes que consumas, es fundamental que:
- Mastiques bien la comida;
- Comas con lentitud;
- Evites comidas que ocasionen gases o ventosidades;
- Ingieras cantidades o porciones más pequeñas, en vez de hacer comidas copiosas;
- Evites los alimentos con grasa, sobre todo los que tienen origen animal.
Cabe destacar que estos consejos son tanto para las personas que han sido operadas de la vesícula, con para aquellas que tienen piedras en la vesícula.
Alimentos que el organismo tolera mejor
Tu régimen debe estar basado en comida que tu organismo tolera mejora, para así evitar que sufras efectos secundarios.
- Verduras a la plancha o hervidas (zanahoria, verduras de hoja que sean bien picadas);
- Caldos de verdura;
- Leche desnatada;
- Frutas hervidas (fresa, durazno, manzana, ciruela, pera, piña);
- Carne de vaca magra;
- Jamón sin grasa;
- Pechuga de pollo sin piel;
- Mermelada, dulces, azúcar (no bollería con crema);
- Pescado blanco (rape, pescadilla, lenguado, merluza);
- Infusiones (anís estrellado, manzanilla, tila, té, matalauva o anís verde);
- Cereales (maíz, avena, arroz, cebada);
- Panes que no contengan grasa (margarina, mantequilla).
Alimentos que el cuerpo no siempre va a tolerar bien
Presta atención a los próximos alimentos, porque depende de tu organismo, puede que los tolere o que los rechace directamente.
- Yogur, natillas, leche entera, flanes, arroz con leche, cuajadas;
- Frutas con piel o crudas (banana, frutilla, pera, piña). Intenta evitar los cítricos como las mandarinas, los limones, las naranjas o los pomelos, por ejemplo;
- Verduras crudas (lechuga, tomate, pepinos, zanahoria, apio, ajos, cebolla);
- Papas;
- Carne de muslo de pollo, conejo;
- Quesos bajos en grasa o que sean desnatados;
- Alcohol (sobre todo los licores y los vinos fuertes);
- Repostería pobre en grasa (magdalenas, bizcochos, galletas).
Alimentos poco aconsejables o prohibidos
Este grupo de alimentos, es mejor evitarlos a toda costa.
- Todo tipo de embutidos;
- Carnes grasas (cerdo, cordero, gallina);
- Huevos (las claras se pueden consumir, pero la yema contiene grasa);
- Chocolate;
- Quesos con grasas;
- Mantequilla;
- Pescado azul (salmón, sardinas, boquerones, caballa, jureles, marisco).
Alimentos absolutamente prohibidos
- Frutos secos como (almendras, pistachos, cacahuetes, nueces);
- Vísceras;
- Sesos.
Para ayudar en la dieta si estás operado de la vesícula, cuando cocines, hazlo al horno, al vapor, a la plancha o a la papillote, es decir, la técnica de envolver los alimentos en papel vegetal o aluminio. Evita a toda costa las fritas porque esto es muy perjudicial para tu organismo. Si eres fumador, deja el vicio, olvídate de las salsas en las comidas, al igual que de los picantes y los aderezos. Los alimentos procesados, al igual que la comida basura deben ser parte del pasado en tu vida. Ten en cuenta que, como mucho, deberías ingerir entre 2 a 3 cucharada de aceite por día.
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Los datos expuestos en este artículo no substituyen la consulta con un médico. Cada persona es diferente y presenta un cuadro clínico distinto. Todo y que esto es una guía que te puede servir para tener una noción de qué puedes comer y qué no, lo más indicado es que visites a tu doctor de confianza para que este te estipule una dieta adecuada a tus necesidades, teniendo en cuenta tu historial médico.
Para finalizar, en el siguiente vídeo puedes conocer cuáles son los síntomas que avisan que algo está mal con la vesícula.
