Es este tipo de actitudes las que desalientan a muchas personas que quieren hacer el bien. Una mujer, aprovechando la buena voluntad de una institución, fingió tener cáncer terminal. Todo esto para tener gratis una fiesta de bodas como donación. Pero las cosas no terminaron como ella esperaba…
La ONG Wish for a Wedding, con sede en el Reino Unido, tiene como objetivo otorgar el “último deseo de un matrimonio a parejas que enfrentan una enfermedad terminal”. Ellos organizan la fiesta, obtienen el vestido de novia, el pastel, el lugar y todo lo demás para una fiesta perfecta. Para esto, tienen una enorme red de voluntarios, ya sean personas físicas o jurídicas, así como donaciones regulares.
Según la institución, este apoyo es fundamental, dado que de esta manera puede “dar a más parejas un último día especial para recordar antes de que sea demasiado tarde”. Puede parecer pesado, pero imagina la difícil situación de las personas con enfermedades terminales que no pueden casarse. Ya sea por el alto costo del tratamiento o incluso por no dejar deudas para el que se queda de la pareja.
Así, a través de esta hermosa iniciativa, consiguen ayudar a cerca de 10 parejas al año, con una ayuda que, en conjunto, representa aproximadamente 15.000 libras, mucho más que suficiente para hacer una fiesta inolvidable, con todo el refinamiento que la pareja quiere. Pero incluso en medio de tanta donación y belleza, hay personas que quieren arruinar el proceso.
Y eso es, por desgracia, lo que sucedió. Carla Louise Evans, una joven sana, madre de familia y novia de Caerphilly, decidió engañar a la institución para que tener “una boda gratis”. ¿Pero a qué costo? ¿Qué familia no recibió esta bendición y qué pasó después? ¿Valió la pena?
Mujer finge tener cáncer para conseguir el premio de una boda gratis
Carla, de tan solo 29 años, mintió a todos afirmando tener cáncer de vejiga e insuficiencia hepática. Ella hizo esto solo para burlar un sistema de donaciones, sin imaginación del dolor que estaba causando, tanto el quien cree y ayuda, como a su propia familia. Incluso dijo que no tenía mucho tiempo para vivir, usándolo para celebrar una fiesta de bodas.
Para ello, contactó a Wish for a Wedding y le mostró informes falsos con firmas de un médico local, el Dr. Adam Carter. Así consiguió las 15.000 libras, teniendo que entregar con solo 500 libras para celebrar su fiesta de casamiento. Sin embargo, a un empleado le extrañaron algunos datos y decidió investigar.
Al contactar al hospital donde dijo que estaba recibiendo tratamiento, se le informó que nunca lo había pisado. Inmediatamente, la institución llamó a la policía para ver si realmente fue un error o un fraude puro. Desafortunadamente para todos, fue una mentira sin la menor vergüenza.
De esa manera, Carla ahora será procesada y podría enfrentarse hasta 3 años de cárcel por fraude y tergiversación en el Tribunal de Magistrados de Newport. Ella tiene dos hijos pequeños y debe responder en libertad hasta que se tome la decisión final.
