Las perspectivas más optimistas le daban hasta 5 años de vida. Sin embargo, a pesar de la situación, ella no se desanimó y sorprendió a todos.
En 2011, Candice-Marie Fox descubrió que tenía un nódulo por encima de su clavícula. Consultó especialistas y descubrió que se trataba de un cáncer de tiroides. Inició los primeros tratamientos, pero el cáncer terminó esparciéndose en otros órganos del cuerpo.
Inclusive al haber recibido la noticia de que el cáncer se había esparcido, la modelo se mantuvo firme y comenzó una investigación personal acerca del cáncer y las posibles formas de tratarlo. Al no querer deteriorar más su cuerpo, Candice apostó todas sus fichas en su alimentación. Descubrió que alterando sus hábitos alimenticios existía la posibilidad de que su organismo renovara sus propias células y ayudara a su cuerpo a aceptar de mejor forma el tratamiento para la enfermedad.
De esta forma, todos los días comenzó a comer 3 piñas. En sus investigaciones, Candice descubrió que la piña es muy rica en bromelina, una sustancia que tiene la capacidad de disminuir las células que causan el cáncer. Candice pasó a comer otro tipo de frutas como kiwi, banana, limón y manzana. La proteína animal quedó bien apartada de su dieta. Dejó también de utilizar productos de belleza repletos de químicos, dejó de beber alcohol, dejó de fumar y comenzó a practicar yoga.
Después de tantos cambios en su forma de pensar y en sus hábitos, pasados 6 meses, el cáncer desapareció. Sus médicos sorprendidos con los resultados, la declararon totalmente libre de peligro.
Con esto se comprueba que la alimentación saludable es una excelente aliada en el tratamiento de varias enfermedades.
Consulte a su médico y a un nutricionista para mayor información antes de comenzar un tratamiento por cuenta propia.
Importante: este consejo jamás debe sustituir una consulta con su médico
Esta historia es muy bonita, sin embargo hay controversias.
Fuente: DailymailJournal
