Cuando el médico nos manda a tomar una nueva medicina, de inmediato acudimos al prospecto incluido en el interior. En este prospecto, leemos siempre su composición, tu posología, las interacciones con otros medicamentos, y una lista, casi siempre larga, de efectos adversos y contraindicaciones.
Algunos de los efectos adversos son realmente terribles, tales como problemas renales, o problemas psiquiátricos, entre muchos otros. Sin embargo, casi siempre pasamos de largo, y confiados en nuestros médicos y en la insdustria farmacéutica, suponemos que no nos tocará a nosotros padecer de semejantes consecuencias.
Pero la verdad es que no necesariamente estos efectos son escandalosos, así que pueden ir haciéndose sentir muy poco a poco sin darnos tiempo de relacionar una cosa con la otra.
Parte de los daños que pueden traer ciertos medicamentos de uso bastante extendido son cerebrales, es decir, que afectan el área cognitiva del cerebro, incluida la memoria y la capacidad de aprendizaje.
Vamos a conocer cuáles son estos medicamentos y, ante cualquier duda, usted debe acudir a su médico de inmediato:
Antihistamínicos, antibióticos, antidepresivos, antipsicóticos, antiespasmódicos o antihipertensivos
Este tipo de medicamentos interfiere con la producción de acetilcolina, la cual se relaciona con la memoria y el aprendizaje, además de muchos otros síntomas como visión borrosa, demencia, trastornos alimentarios, etc.
Estatinas
Se trata de medicamentos que regulan el colesterol, pero el problema está en que el cerebro necesita un porcentaje de colesterol para su funcionamiento. Antes de asumir ese riesgo, pregunte a su médico su puede sustituir la estatina por una aleación de vitaminas B12 sublingual (1.000 mcg al día), vitamina B6 (200 mg al día) y ácido fólico (800 mcg diarios).
Medicamentos para dormir
Este tipo de medicamentos no nos hace dormir realmente, sino entrar en un estado de aletargamiento. Así, el cerebro no se repone propiamente.
Ante estos medicamentos es mejor optar por consumir melatonina, la sustancia que estimula el sueño en el cerebro naturalmente. Eso sí: todo lo que tome, hágalo bajo vigilancia médica.
Esta lista ha sido suministrada por el ex vicepresidente del Departamento de Psiquiatría de la Escuela de Medicina Mount Sinai, doctor Richard C. Mohs.
Si piensa en dejar alguno de ellos, consulte primero con su médico de confianza.
- Analgésicos – morfina, codeína, heroína
- Antibióticos (quinolonas)
- Antidepresivos tricíclicos
- Antihistamínicos
- Antipsicóticos – Mellaril, Haldol
- Barbitúricos – Nembutal, Fenobarbital, Seconal, Amytal
- Benzodiazepinas – Xanax, Valium, Dalmane, Ativan
- Bloqueadores beta
- Enfermedad de Parkinson – atropina, glicopirrolato, escopolamina
- Epilepsia – Dilantin o fenitoína
- Esteroides
- Insulina
- Interferones
- Litio
- Medicamentos para la presión arterial alta
- Metildopa
- Naproxen
- Píldoras para dormir – Ambien, Lunesta, Sonata
- Quimioterapia
- Quinidina
A continuación compartimos 2 videos, el primero con un informe sobre cómo las pastillas para dormir afectan la memoria y el segundo, qué alternativas tiene para dejarlas:
