Una reciente investigación sobre factores de riesgo y desarrollo de enfermedades crónicas ha dejado a la comunidad científica boquiabierta. Según el estudio, la mala alimentación mata más que el tabaco y otros hábitos perjudiciales para la salud. El trabajo puede consultarse en The Lancent y aquí se presenta un breve resumen de sus hallazgos.
¿La mala alimentación mata más que el tabaco?
Financiado por la Fundación Gates, el estudio es un ambicioso análisis de datos nutricionales recogidos durante 27 años en 195 países. Esta enorme masa de información fue recopilada, ordenada e interpretada por un numeroso equipo. El mismo fue dirigido por Ashkan Afshin, Patrick John Sur, Kairsten A. Fay y Leslie Cornaby, entre otros. Las proporciones y el alcance de esta investigación resultan inéditas. También sus resultados y conclusiones, los cuales revelan que la mala alimentación mata más que el tabaco.
No dejes de conocer los mejores alimentos para la salud vaginal.
El método de la investigación
Cuando se trabaja con semejante cantidad de información, hay que desarrollar métodos que permitan extraer sentido de unos datos que parecen más bien abstractos. En este caso, la información nutricional de adultos mayores de 25 años fue comparada para estimar la proporción de enfermedades crónicas atribuibles a cada uno de los 15 factores de riesgo considerados.
De esta manera, el impacto de factores de riesgo como la ingesta de carnes rojas y/o procesadas, sal, azúcares y grasas trans, entre otros, se comparó con los efectos de una nutrición baja en alimentos saludables. Estos son frutas, vegetales, legumbres, granos enteros, ácidos grasos omega 3, leche o grasas buenas, entre otros. Es decir, se contrastó la incidencia de enfermedades crónicas entre personas con mala alimentación y personas con alimentación insuficiente. Hábitos dañinos como el tabaquismo y el sedentarismo también se consideraron como factores de riesgo.
Resultados del estudio
Luego de procesada la data, se halló que la mayoría de las muertes e incidencia de enfermedades crónicas se debieron a 3 factores de riesgo. El primero y más importante: un consumo elevado de sodio o sal. Después figura una dieta baja de granos enteros. Finalmente, la ingesta insuficiente de frutas crudas y en estado natural fue la tercera causa. Por supuesto que la llamada incertidumbre estadística se tomó en cuenta, así como un apropiado margen de error.
El mundo por regiones
A pesar de que estos factores son consistentes alrededor del mundo y transversales entre clases sociales diferentes, sí pueden distinguirse matices regionales. En México, por ejemplo, el déficit en el consumo de verduras, frutas y granos integrales es un factor determinante en la ocurrencia de muertes y enfermedades crónicas. Este país, por cierto, fue el único en el que la ingesta de bebidas azucaradas incidió en los resultados.
Cabe destacar que México es país con más casos de diabetes a edades tempranas.
Países asiáticos como China, Tailandia, Japón e Indonesia, tienen un consumo elevado de sal. En otras naciones como Brasil, Estados Unidos, India, Alemania e Irán, una ingesta baja de granos integrales aumentó el número de muertes y personas que padecen de enfermedades crónicas. La amplitud de la muestra evidencia curiosas diferencias que desmontan mitos arraigados sobre la alimentación alrededor del mundo.
Consejo final: Come más alimentos saludables
Este estudio comprueba que aumentar el consumo de alimentos saludables es más beneficioso que limitar la ingesta de alimentos perjudiciales. Naturalmente, lo ideal es incrementar los primeros y reducir los segundos. Aunque la mala alimentación mata más que el tabaco, éste y otros hábitos dañinos también inciden en la calidad y la expectativa de la vida.
Aprende los mejores trucos para hacer el arroz más saludable.
Al contrario de lo que se piensa, comer bien no tiene que ser caro. Para terminar, no dejes de ver a Sascha Fitness hablando sobre las alternativas más saludables entre los alimentos económicos.
