El lirio de la paz es una planta de hojas muy verdes y flores blancas, bastante popular en Brasil. Su nombre científico es Spathiphyllum wallisii y fue descubierto en el siglo XIX en América Central. Su cultivo es simple y está en la lista de plantas que purifican el aire de la casa. Aquí se explica cómo cuidarla para garantizar la floración en el jardín o en macetas de esta flor.
Cómo plantar el lirio de la paz
El lirio de la paz es una planta adaptada al clima tropical. Por lo tanto, es adecuada para ambientes cálidos y húmedos, con mucha luz natural. Esto no quiere decir que necesite luz solar intensa directamente sobre las hojas, ya que existe el riesgo de quemarse. Por lo tanto, escoge la ubicación más adecuada según el siguiente consejo.
1. Escoge la localización
Puedes plantarlo en maceta o en una huerta. La maceta puede estar en el interior de la casa, pero permite que reciba luz natural al estar cerca de la ventana o la puerta de la calle. Si está en una huerta o jardín, trata de mantener la planta cerca de otros árboles más grandes que la protejan de la luz solar directa todo el día.
2. Preparando la tierra
Para plantar en macetas, recuerda que siempre debes colocar una capa inferior con piedra triturada o arcilla expandida para promover el drenaje del suelo y no encharcar las raíces.
El suelo debe ser muy fértil, con ligera acidez y muchos nutrientes. Puedes usar arena gruesa o fertilizante orgánico con humus de lombriz de tierra. En el jardín, prepara el suelo y déjalo bien revuelto y suave antes de plantar.
3. Plantío
Una vez que tengas la tierra lista, todo lo que debes hacer es cavar un hoyo y colocar las plántulas dentro, tapándolas sin apretarlas. Riega alrededor, dejando la tierra bien húmeda.
Cómo cuidar del lirio de la paz
El cuidado del lirio de la paz es simple, por lo que es una buena planta para comenzar tu jardín o para una maceta en el interior de tu casa.
Cuidado con el riego
El suelo de la planta no puede secarse ni encharcarse. Ves regando todos los días durante el verano o mientras se desarrolla el cambio. Luego, cerca de 3 o 4 veces por semana será suficiente, conforme observes la tierra más seca.
Alimentación y podas
Nutrir esta planta también es simple porque este proceso se puede hacer una vez al mes, de media, dependiendo de su tamaño. Nutre con fertilizante casero o NPK a través de la fertilización foliar. Cuando notes hojas secas, retíralas para que no dañen la planta al caer al suelo.
Luminosidad
El lirio no necesita luz solar directa para evitar quemar las hojas, pero tampoco puedes olvidarlo a la sombra porque sus hojas se debilitarán. Mantenlo en un lugar luminoso cerca de una ventana o la puerta de la calle.
Características de la planta
Esta es una buena planta para tener dentro de casa, siempre que la dejes cerca de la luz natural para que obtenga un poco de sol y bastante luminosidad. Esta ayuda en la purificación del medio ambiente.
Si mantienes la planta por encima de los 5 grados centígrados, resistirá bien durante el invierno, lo cual es ideal para quienes viven en climas más fríos. Sin embargo, en invierno, lo ideal es mantener la planta a una temperatura de 15 grados, por lo menos. Lo ideal para su desarrollo saludable es permanecer en un clima húmedo, con temperaturas entre los 20 y 27 grados.
La planta suele alcanzar una media de 50 centímetros de altura, lo cual es ideal para crecer en macetas. Sin embargo, escoge un recipiente mediano para que pueda desarrollarse bien.
¿Cuándo florece?
El florecimiento del lirio de la paz ocurre 2 veces al año. En verano y en primavera,
¿El lirio es venenoso?
En la savia de la planta, cuando se rompe su tallo, hay un líquido tóxico. Por eso, se debe manejar con cuidado y mantenerse fuera del alcance de los niños y las mascotas. No todos tendrán una reacción alérgica fuerte, pero ten cuidado y busca atención médica si notas el contacto, especialmente si alguien ha ingerido la “leche”.
Cómo hacer plántulas para replantar
Si plantas el lirio en una maceta pequeña, pronto te darás cuenta de que está un poco apretado y necesita ser trasplantado. Entonces, puedes transferir toda la planta a una maceta más grande, aumentando la cantidad de tierra fertilizada, o puedes quitar la planta de la maceta en la que se encuentra y separarla en más plántulas, con delicadeza con tus manos.
De esta manera, puedes mantener cada uno en macetas más pequeñas y repartidas por toda la casa. Es muy simple, solo precisas separarlos con delicadeza y volver a colocar cada uno en una maceta, poner más tierra nueva y regar.
