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Levantar la bandeja cuando acabas de comer no se trata de un favor, sino de un gesto de educación

La actitud que muestras en lugares públicos es un reflejo de la educación que traes de casa

Crédito de la imagen: Pixabay

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Cuando surgieron los centros comerciales, hizo que el concepto de comprar de muchas personas cambiase. Ahora en los shoppings encuentran todo tipo de tiendas, supermercados, peluquerías, cines y demás establecimientos. Por lo tanto, se pueden pasar el día entero ahí, sin necesidad de tener que salir y comprar todo lo que necesitan. Dado que van a estar varias horas, el que lo inventó, también creó un área de comida para que las personas coman con diferentes locales. Como existe un área común donde la gente se puede sentar, cuando terminan su comida, algunas dejan la bandeja en la mesa y otras no. Esto es algo que siempre ha creado un debate entre qué es lo que está bien y lo que está mal. Pues debes saber que levantar la bandeja cuando acabas de comer no se trata de un favor para las personas que trabajan limpiando, sino un gesto de educación.

Levantar la bandeja cuando acabas de comer no se trata de un favor, y sí de una muestra de educación

Levantar la bandeja cuando acabas de comer no se trata de un favor para el personal que limpia en centros comerciales, ferias, fiestas populares u otros eventos. Este gesto es un indicativo de que tienes buena educación. Hay personas que argumentan que no lo hacen porque de esta manera les están quitando el trabajo al personal de limpieza, pero no es así.

Cuando tienes este tipo de actitud demuestras que traes de casa una buena educación y que es un hábito que en tu hogar también haces. Evidentemente, si vas a un restaurante, no te vas a levantar de la mesa con los platos. En este tipo de hostelería, los establecimientos cuentan con un personal de camareros que realizan esta tarea.

De la misma manera que en los restaurantes tienen a sus empleados para hacer este servicio, cuando vas a un café pequeñito, en la mayoría de ellos, es el propio dueño que te sirve el desayuno, el que luego cuando te vas acude a la mesa donde estabas  a recoger lo que dejaste. Por lo tanto, debes tener un poco de sensibilidad y darte cuenta de estas cosas.

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Evidentemente, una vez que pagas, nadie te va a obligar a levantar la bandeja o la taza de café. Pero está en ti el mostrar tu educación y tener un gesto y facilitarles el trabajo a los demás.

La educación se trae de casa

Cuando vayas a algún sitio en los que no haya un servicio de meseros, recuerda lo que te enseñaron tus padres desde bien chiquito, nadie se levanta de la mesa dejando los platos en ella porque es de mala educación. Hay que llevarlos al fregadero o lavavajillas y contribuir con las tareas del hogar porque entre todos las cosas se hacen más rápido. Es más, había días que eras tú al que le tocaba lavar la loza porque la casa es de todos y nadie es la chacha de nadie.

Es más, incluso si en tu casa tenías personal de limpieza, aún así, seguro que tus padres te instruyeron para que fueras organizado y no fueras dejando todo tirado por ahí en señal de respeto hacia esa persona.

Siempre que estés en un lugar público, piensa que de la manera en que te encontraste la mesa, a la persona que se va a sentar después le gustaría que estuviese. Si todo el mundo dejase sus desechos, el personal de limpieza no daría abasto para higienizar todo. Por lo tanto, recoge tu bandeja y los restos de tu comida y deposítalos en la papelera y los lugares indicados. Es un simple gesto que a ti no te cuesta nada y que hace la diferencia en los demás, además de mostrar mucho la persona que hay en ti.

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Conoce aquí la historia de una empleada de la limpieza que es humillada por un hombre.

Para acabar, puedes conocer en el siguiente vídeo un centro comercial que hay en Bogotá, que es solo de comida.

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