La leche de avena es una bebida de origen 100% vegetal, que puede ser consumida por vegetarianos y personas intolerantes a la lactosa. Por supuesto que también pueden tomarla aquellos que beben leche de vaca. Se trata de un alimento extraordinariamente nutritivo, con múltiples beneficios para la salud.
5 Beneficios de la leche de avena
Las propiedades de la avena son muchas. Puede ayudar a adelgazar, mejora la piel y la digestión, permite que los diabéticos controlen el azúcar y previene el envejecimiento. Sin embargo tiene otras propiedades igualmente importantes, que se presentan a continuación.
Alivia el estreñimiento
La leche de avena mejora el funcionamiento de los intestinos. Su alta concentración de fibras solubles e insolubles tiene el efecto de prevenir el estreñimiento y depurar el organismo.
Controla el colesterol
Quienes sufren problemas cardiovasculares pueden aprovechar este beneficio de la avena. Tres elementos presentes en el cereal ayudan a controlar el colesterol. El primero son los aminoácidos como la metionina, también las fibras naturales y finalmente, las grasas insaturadas omega 6.
Promueve la formación de tejido
Todo el cuerpo está formado por tejido: los huesos, la piel, las arterias y venas del sistema circulatorio, los órganos, músculos, todo está hecho de tejido orgánico que se renueva continuamente. La avena aporta la proteína necesaria para que este proceso pueda ocurrir.
Previene algunas formas de cáncer
La avena contiene dos sustancias que pueden prevenir la aparición del cáncer de mama y cáncer de colon. Los compuestos lignanos y los fitoestrógenos, presentes en la avena, combaten las células cancerígenas en sus estadios iniciales.
Reduce el estrés y la ansiedad
Las vitaminas del complejo B presentes en la leche de avena tienen el efecto de distender los músculos y relajar el cuerpo. Por eso, como ha sido reiteradamente comprobado, las vitaminas B pueden reducir la ansiedad y el estrés acumulado. Además, el contenido de sílice de la avena mejora el funcionamiento del sistema nervioso central.
Cómo usar la leche de avena
Esta leche se usa de la misma manera que la leche de vaca. Puede tomarse sola o acompañada de café, chocolate o cereales. La leche de avena también puede consumirse fría o caliente, sin desmejorar sus propiedades. Además es usada para preparar salsas, cremas, batidos de fruta y toda clase de postres.
Contraindicaciones de la leche de avena
La leche de avena es en general una bebida segura y nutritiva. Sin embargo se recomienda que algunas personas se abstengan de consumir este cereal en cualquiera de sus formas. Seguidamente dos grupos de personas para los que la avena está contraindicada.
- Celíacos y personas sensibles al gluten
A pesar de que la avena no contiene gluten, se desaconseja su consumo por parte de celíacos. Es frecuente encontrar rastros de gluten en la avena disponible en el mercado. Esto se debe a que la avena suele procesarse junto a otros granos en los centros de producción.
- Personas con enfermedades autoinmunes
La avena tiene algún contenido de los llamados antinutrientes, compuestos naturales que entorpecen la absorción de los nutrientes. Las personas que padezcan algún tipo de enfermedad autoinmune deben abstenerse de consumir avena y otros cereales.
Cómo hacer leche de avena en casa
Hacer leche de avena es muy sencillo y sumamente rápido. La versión casera de esta leche solo requiere un par de ingredientes muy económicos y fáciles de encontrar. La siguiente es una receta básica para hacer leche de avena en casa.
Ingredientes
- Avena en copos: 6 cucharadas;
- Agua: 1 litro.
Modo de preparación
1. Ponga la avena en el vaso de la licuadora;
2. Vierta el agua en la licuadora y mezcle a alta velocidad hasta obtener un líquido blancuzco;
3. Cuele la mezcla con un colador y luego con una tela o malla más fina;
4. El líquido obtenido es la leche de avena;
5. Puede espesar o diluir la leche agregando avena o agua;
6. Finalmente puede endulzar la leche de avena con un poco de miel o azúcar moreno.
Consejo final: Conservar la leche de avena
Si fue envasada y refrigerada apropiadamente, la leche de avena preserva la mayoría de sus propiedades hasta 4 días después de preparada. Sin embargo y para sacarle el mejor provecho, conviene tomarla en las primeras 48 horas.
Para finalizar, en este video podrá ver la preparación de la leche de avena:
