La quinoa es un producto originario de los Andes que está cada vez más presente en las cocinas de todo el mundo. Se trata de una semilla con una altísima concentración de proteína vegetal. Es, también, una buena fuente de ácidos grasos esenciales, minerales y micronutrientes como las vitaminas del complejo B. Sin embargo, contiene también un elemento tóxico que debe ser removido mediante un simple lavado. Aquí se explica cómo lavar quinoa y las razones para hacerlo.
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Cómo lavar quinoa paso a paso
Lavar quinoa es muy fácil y te permitirá prevenir problemas como los que se describen más adelante. Necesitarás unos pocos minutos, un recipiente, agua fría y agua caliente. Sólo sigue las indicaciones paso a paso que se presentan a continuación.
Limpieza
Lo primero es esparcir los granos para limpiar la quinoa de piedritas y cualquier elemento extraño. Hazlo sobre un plato y saca, también, cualquier grano en mal estado. Utiliza tus manos para esta fase de limpieza mecánica.
Lavado caliente
En un recipiente con abundante agua caliente, lava bien la quinoa. Revuelve con fuerza y déjala luego reposar algunos minutos. Toma luego el bol y escurre el agua caliente. Si está disponible, puedes utilizar un colador.
Lavado frío
Llena de nuevo el envase con bastante agua fría. Remueve, una vez más, con fuerza y deja luego reposar por un par de minutos. Escurre después el agua fría. La quinoa lavada ya estará lista para ser cocida.
Cocción
Para cocer la quinoa de forma segura, agrégala en agua hirviendo una vez que haya sido lavada. Con 500 mililitros de agua podrás cocinar 500 gramos de quinoa. Déjala a fuego moderado por entre 15 y 20 minutos. Cuando se haya cocido podrás disfrutar este saludable alimento.
¿Por qué hay que lavar la quinoa?
Los granos de quinoa deben lavarse de esta forma para eliminar las saponinas que tienen en su cubierta. Esta sustancia tóxica está compuesta de glucósidos de esteroides o triterpenoides. Funciona como un pesticida natural y protege la planta de aves e insectos. Otros alimentos, como el jengibre y la yuca, también contienen saponinas. Generalmente, se reconocen con la llamada prueba de la espuma. Mientras más espuma generen al ser lavados, mayor será la concentración de saponinas que contienen.
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Qué pasa si se come la quinoa sin lavar
Si no eliminas cualquier resto de saponinas con el lavado, la quinoa tendrá un sabor amargo. Su gusto será completamente diferente y puede, incluso, resultar desagradable. Por otro lado, las saponinas tienen el efecto de alterar los niveles de colesterol en la sangre y el hígado, lo que interfiere en la absorción de los nutrientes. No obstante, las saponinas resultan tóxicas solo si se suministran por vía endovenosa o se ingieren en grandes cantidades.
Ahora que sabes cómo la lavar la quinoa, no dejes de prepararla con un suculenta receta. En el video a continuación, podrás aprender a elaborar deliciosas tortitas de quinoa y atún.
