Si es complicado para un adulto quedarse sin aliento, imagínate para un bebé. Además de no tener idea de lo que le está pasando, todavía no tienen control sobre su respiración. De esta forma, saber cómo lavar la nariz con suero fisiológico puede ser muy útil. Esto se debe a que puede evitar una mayor contaminación y ayudar a tratar cualquiera que ya se haya instalado.
Existe una manera correcta de hacer la limpieza para evitar que el niño o el bebé se asfixien durante el proceso. Además de eso, el producto utilizado debe ser el correcto. Ten en cuenta que el agua no se recomienda, a pesar de ser común. También hay un horario ideal para hacer la limpieza.
Cómo lavar la nariz con suero fisiológico
Hacer la higiene ayuda a eliminar la mucosidad atrapada en los conductos nasales, lo que ayuda a que el niño respire mejor. Además de eso, elimina los agentes instalados mecánicamente, haciendo que la enfermedad se cure más rápido.
Además, si se hace periódicamente, ayuda a prevenir nuevas contaminaciones. Esto se debe a que esta parte temprana del sistema respiratorio (conductos nasales, membranas mucosas, cabello, etc.) es como un filtro. Entonces, ayuda a eliminar lo que se ha retenido al evitar que agentes extraños ingresen al cuerpo.
Lo ideal es hacerlo 1 vez por semana, cuando el niño no esté engripado, pudiendo aumentar a 2 o 3 veces en invierno. Lo ideal en este caso, es limpiarle la nariz después de que vuelva del colegio. Cuando está enfermo, se puede hacer a diario, preferiblemente antes de acostarse.
Suero fisiológico
Nunca uses agua para hacer la limpieza ya que no hay forma de saber si tiene algún tipo de contaminación. De esta manera, lo ideal es invertir en pequeñas botellas de suero fisiológico, siendo más seguro para el organismo. Este debe aplicarse a temperatura ambiente y nunca helada, para evitar la irritar de la región. A pesar de ello, debe ser almacenado en el frigorifico por un máximo de 15 días.
Posición del bebé
Para aplicar el suero al bebé, debes colocarte correctamente para evitar que el suero vaya a otros canales. Otra precaución importante es mantener las manos fuera del alcance de la jeringa para evitar que se golpee y se lastime. Entonces, haz un atado, envolviendo al bebé en la silla para mayor seguridad. Ponlo contra tu vientre, mirando hacia adelante e inclinado hacia un lado.
Posición del niño
Puede parecer más fácil con un niño, pero dependerá mucho de su personalidad y de sus padres. Lo ideal es que este comprenda la importancia de limpiarse la nariz y permita que los padres le apliquen el suero. Para hacer esto, se puede colocar al niño en el regazo o sentarse frente a él, pidiéndole que incline la cabeza hacia el lado opuesto de la solicitud. Con un trapo, sostén la base del rostro, que recogerá la secreción y limpia la cara.
Aplicación del suero en la nariz
Aquí se explica cómo aplicar el suero paso a paso desde la preparación del suero hasta la aplicación y limpieza:
- Coloca el suero en la jeringa apropiada. Esta debe estar esterilizada al final del procedimiento, siendo una jeringa por niño.
- El suero debe estar a temperatura ambiente, 5 ml. para bebés y 10 ml. para niños a partir de 2 años.
- Pon al bebé o al niño en la posición que se comentó.
- Posiciona la punta de la jeringa en la fosa nasal y presiona ligeramente para que el suero enjuague el área. No necesitas hacerlo ni muy rápido ni muy lento.
- Repite en la otra fosa nasal para que todo el canal pueda despejarse.
- Limpia con una toalla o lava la cara del pequeño en la pila.
Resistencia de los niños
Puede ocurrir que el niño no te permita el lavado de la nariz, lo que puede dificultar el proceso. Lo que se recomienda en este caso no es forzarlo, sino hablar con él para que entienda la importancia. Entonces tendrá más trabajo al principio, pero a la larga valdrá la pena.
Para finalizar, en el siguiente vídeo se muestra cómo lavar la nariz con suero fisiológico a un bebé.
