Una madre rusa publicó una fotografía de su bebé para pedir la opinión de madres que habían pasado por algo similar, ¡pero la respuesta que obtuvo fue realmente despreciable! Entre muchos comentarios negativos, se sorprendió al ver que el sacerdote no quería bautizar a su hija. Conoce más detalles del caso.
Odio e ignorancia
Parece que estas dos palabras van siempre de la mano, en diversas áreas de la vida. En el caso de la pequeña Vika Khvostantseva, fue una mancha en su espalda que despertó el odio de los usuarios de Internet. Según estos, creyeron que tenían el derecho de atacar a su familia. Lo que la nena tiene es un nevo melanocítico congénito, una condición rara e inofensiva para otros.
De acuerdo con la Sociedad Brasileña de Dermatología (SBD), esta enfermedad hereditaria “se considera un factor de riesgo para el desarrollo de melanoma”, la forma más agresiva de cáncer de piel. Es por eso que Maria, la madre de Vika, pidió ayuda a otras madres que ya habían pasado por esa situación.
Pero, los comentarios fueron muy diferentes de lo que ella había imaginando que iba a recibir, incluso de llamadas anónimas. Lee algunos de ellos:
“Mata a tu hijo. Tíralo debajo de un tren”, dijo una mujer por teléfono. Un comentario decía que “es mejor morir que ser así” y otro dice que la madre “debería ponerla bajo una lluvia ácida”. La policía ya está investigando y los monstruos que dijeron eso serán castigados de acuerdo con la ley local.
Otras absurdeces
El bebé ya tiene 6 meses y es un bebé muy saludable. Sin embargo, en el momento del parto, empezó su lucha. La propia comadrona dijo que sería mejor entregar a Vika en adopción. El sacerdote local también se negó a bautizar a la niña, pero después de mucha insistencia, cobró una tarifa de alrededor de 50 euros. La madre se negó y denunció el caso, lo que resultó en una investigación del mismo.
La pequeña todavía no ha sido bautizada y María todavía sufre porque hay personas que la señalan y se ríen en las calle. Pero ella, su esposo y el otro hijo saben que esto va a terminar y hacen todo lo posible para darle lo mejor a Vika. En palabras de María: “mi hija es hermosa y muy querida por la familia” y eso es lo más importante. ¡Y el respeto siempre debe existir!
