El también llamado té de kombucha es una bebida fermentada oriunda del extremo oriente. Su utilización es muy antigua en China, Japón y Rusia, países de larga tradición en el aprovechamiento de hongos para la salud. Se obtiene a partir de té endulzado y la acción de una colonia de microorganismos llamada Medusomyces gisevi, el llamado hongo kombucha.
Aquí se presentan algunos beneficios y contraindicaciones de la bebida hecha con este hongo. También se ofrece una guía para preparar en casa esta bebida probiótica.
Propiedades y beneficios de la kombucha
Son muchos y muy diversos los beneficios de esta bebida. Van desde el mejoramiento del cabello, las uñas y la piel hasta un aumento de la resistencia del cuerpo frente al cáncer. Asimismo, se utiliza para adelgazar y perder peso. A pesar de que la lista es larga, aquí solo se presentan 3 beneficios más bien generales.
Salud cardiovascular
Son diversos los efectos beneficiosos de la kombucha sobre la salud cardiovascular del organismo. Por un lado, reduce los niveles de colesterol y promueve la regeneración de las paredes celulares. Esto hace que disminuyan los riesgos de padecer arterioesclerosis. Además, reduce la presión arterial y aligera de esta forma el estrés sobre el sistema cardiovascular.
Efecto antibiótico
Las propiedades antibióticas de la kombucha son efectivas para combatir infecciones micóticas. Hongos como la Candida albicans y otros que afectan la piel y la orina, pueden replegarse y mantenerse bajo control utilizando kombucha. Aquí puedes conocer unos remedios caseros contra la candidiasis. Además, la kombucha también combate otros organismos como virus y bacterias.
Alivia el dolor
La kombucha tiene un efecto analgésico que alivia el dolor crónico en las articulaciones. Igualmente, en músculos y huesos. En especial, muchas personas sienten alivio del síndrome del túnel carpiano, dolores de hombros, muñecas, rodillas y piernas. La kombucha también puede suavizar las molestias asociadas a la artritis.
Otros beneficios de la kombucha incluyen la normalización del tránsito intestinal y la estimulación del sistema inmunológico. Asimismo, el alivio del asma, la bronquitis, los dolores menstruales y de cabeza, mejora las funciones del hígado y el metabolismo en general. Aquí puedes conocer más sobre otros beneficios de la kombucha.
Contraindicaciones de esta bebida
Muchas personas cuestionan la seguridad de la kombucha. Éstas aducen que su preparación no puede garantizar la ausencia de bacterias y hongos peligrosos. Sin embargo, medidas de limpieza adecuadas sí aseguran cierta acidez y concentración de antibióticos que reducen los riesgos y peligros potenciales. De cualquier manera, las que siguen son contraindicaciones de esta bebida.
Embarazo y lactancia
Las mujeres embarazadas o en fase de lactancia deben abstenerse de consumir esta bebida. La kombucha se hace en casa y no siempre es posible garantizar que no se encuentre contaminado. Para evitar riesgos potenciales a la madre y al feto o bebé, se desaconseja beber kombucha durante el embarazo y la lactancia.
Personas con deficiencias inmunológicas
Quienes padezcan alguna enfermedad inmunodepresiva o cualquier otra condición especial del sistema inmunológico, deben evitar el consumo de esta bebida. La razón es básicamente la misma, esta preparación puede contaminarse muy fácilmente con otros hongos y bacterias que podrían resultar muy peligrosos para estas personas.
Cómo preparar esta bebida en casa
La base de esta bebida recibe el nombre de primera fermentación y es el proceso que se describe, a continuación. Un ingrediente opcional que facilita el trabajo es kombucha ya preparado, unos 300 mililitros, aproximadamente un 10% de la cantidad total que será preparada. Sin embargo, contar con la kombucha ya lista no es necesario.
Ingredientes
- Agua mineral: 3 litros;
- Azúcar refinada: 1 taza;
- Té negro: 5 bolsitas;
- Hongo kombucha u hongo chino: 1 unidad.
Modo de preparación
1. Para comenzar, ten a mano una olla de acero inoxidable (puede ser vidrio o cerámica) y un recipiente de cristal previamente hervido.
2. Lava bien el espacio y los utensilios con vinagre y agua caliente. Debes reducir el riesgo de contaminación al máximo. Asegúrate de tener las manos completamente limpias.
3. Calienta el agua en la cacerola hasta que hierva.
4. Agrega el azúcar y revuelve. Apaga el fuego y añade las bolsitas de té negro. Deja reposar la infusión por unos 15 minutos.
5. Vierte el té en el recipiente de vidrio y déjalo ahí hasta que alcance la temperatura del ambiente.
6. Añade el hongo y cubre la boca del recipiente con un paño limpio y una banda elástica. Esta “tapa” permite la ventilación del aire y ofrece alguna protección.
7. Guarda el recipiente en un lugar oscuro y ventilado por entre 6 y 10 días. Al cabo de este tiempo, la bebida habrá perdido dulzor y ganado olor a vinagre. Si es el caso, ya la puedes beber.
La colonia de hongo que se ha formado sobre la anterior puede guardarse en la nevera para una nueva preparación de esta bebida.
Consejo final
Si quieres experimentar las bondades de este hongo, puedes adquirirlo en alguna tienda naturista. En establecimientos de este ramo, podrás encontrar orientación para preparar esta bebida. Si tienes alguna duda, lo mejor es que consultes con un médico. Él podrá examinarte y saber si este producto es recomendable para ti.
Para terminar, puedes ver en el siguiente video la preparación paso a paso de esta bebida probiótica.
