Desde un bulto a una hinchazón estomacal, pasando por fiebre elevada y convulsiones. Miles de enfermedades existen en el mundo y muchas de esas pueden ser letales para las personas. Sin embargo, hay otras que, aunque no causen problemas fatales, pueden asustar al paciente. A continuación, descubre cómo saber si esos síntomas son inofensivos o mortales.
Cómo diferenciar los síntomas inofensivos o mortales
Son tiempos en los que las enfermedades evolucionan y todo tipo de información está al alcance de un click. No importa si es confiable o no, las personas buscan respuestas inmediatas cuando sienten que algo no anda bien con su salud. Para ayudar en esto, un nuevo libro revela todo lo que un paciente del siglo XXI necesita saber. Así, las personas podrán conocer cómo diferenciar entre síntomas inofensivos o mortales.
Los doctores Christopher Kelly y Dr. Marc Eisenberg escribieron “¿Estoy muriendo?”. En el exitoso ejemplar, repasan todo tipo de síntomas y sugieren cuándo entrar en pánico y cuándo relajarse.
Afortunadamente, la mayoría de los síntomas nuevos no son un gran problema. Pero siempre se debe consultar con el médico de cabecera para descartar por completo cualquier tipo de problema.
Diarrea
Tener diarrea por un período inferior a las 48 horas se puede deber a la ingesta abusiva de algunos alimentos. Un ejemplo puede ser el hábito de beber café. Pero esta situación podría ser preocupante si se expande en el tiempo porque podría indicar otros problemas más graves.
Aprende cómo alimentarse durante un proceso de diarrea.
Panza inflamada
Generalmente, la hinchazón estomacal se produce por la presencia de aire en el estómago o en el intestino. Esto causa eructos o flatulencia, respectivamente. Por ende, es normal sentirse hinchado de vez en cuando, sobre todo después de comer demasiado.
Una de las causas de este problema puede ser la ingesta de chicles. La goma de mascar alivia el estrés pero facilita el ingreso del aire. Otra puede ser beber gaseosas con una pajita. Usar un sorbete facilita el ingreso de aire al estómago. Además, si se utiliza para beber refrescos, las burbujas producen flatulencia.
Sin embargo, si la inflamación persiste, puede ser que lo que esté sintiendo sean los síntomas de un serio problema. Uno puede ser la diabetes y la dificultad de retener alimentos.
El estómago, normalmente, agita la comida en trozos pequeños. Con el proceso digestivo, los restos de los alimentos son empujados hacia los intestinos.
Otro problema más complejo son los que se dan al sentir náuseas y dolor abdominal intenso. Si esto ocurre, es posible que haya una obstrucción en los intestinos. Esto impide el paso normal de los alimentos y el aire. Si no se trata se pueden causar severos daños y poner en peligro la vida.
La hinchazón estomacal también puede significar la posibilidad de tener líquido en los intestinos. Las posibles causas de este síntoma también pueden ser enfermedades del hígado, cardíacas y hasta oncológicas. Por eso, uno de los estudios que más se recomiendan es una ecografía del abdomen.
Sudoración excesiva
También es importante prestarle atención a la sudoración excesiva. Si ésta se produce de manera habitual y va acompañada de pérdida de peso, sin estar haciendo deporte, puede ser in síntoma de estar padeciendo algún cáncer, tuberculosis o tiroides hiperactiva.
Consejo final:
Es importante hacer chequeos periódicos para poder agarrar ciertas enfermedades en la fase inicial. Asimismo, en caso de tener algún síntoma que persista, es fundamental acudir a un doctor para que te evalúe.
Para finalizar, en el siguiente vídeo podrás saber más sobre cómo descubrir los síntomas inofensivos o mortales.
