Kenneth Good es un antropólogo americano especializado en un grupo indígena del sur de Venezuela llamado Yanomami, este grupo vive en el medio de la selva amazónica y es uno de los grupos que hasta el día de hoy vive casi de la misma manera que antes de la colonización.
El lugar de la aldea es de difícil acceso ya que está cercado por plantas y ríos. Kenneth tenía interés de estudiarlos más de cerca y por esta razón se fue a vivir durante los años 70s con ellos pero, lo que jamás espero fue encontrar el amor viviendo entre ellos.
Viviendo con la tribu Kenneth aprendió su idioma y con el paso del tiempo comenzó a ser tratado como parte del grupo. Un día el jefe de la aldea le dijo que se casará con su hija más joven, una niña de 12 años llamada Yarima, pero este hombre de 38 años no sentía que fuese correcto. Sin embargo, los años fueron pasando y los dos comenzaron a enamorarse.
¡Era cuestión de tiempo para que se enamoraran!
Este joven antropólogo no tenía intenciones de llevar a Yarima a vivir con él en los Estados Unidos pero, terminó por tomar está opción debido a que las dos veces que se había ausentado, Yarima había sido atacada por un grupo de hombres.
Kenneth nunca pensó que para Yarima conocer el mundo moderno fuese un choque cultural tan grande, esta india no había conocido nada más que la selva y todo lo que conocía le causaba mucha impresión.
Al ver una camioneta por primera vez, se escondió sin pensarlo dos veces debido a que creía que era un animal enorme hecho de acero. La pareja fue a vivir en New Jersey, lugar en el cual Yarima comenzó a acostumbrarse a algunas cosas que para ella no eran comunes, como utilizar ropa todos los días, pero la verdad es que había una gran cantidad de situaciones que no conseguía entender. Para Yarima las personas vivían aisladas y en completa soledad.
Yarima estaba acostumbrada a pertenecer a un grupo pequeño de personas que siempre compartían sus vidas juntas y en esta ciudad tan grande ella no veía eso debido a que las personas vivían encerradas en su habitación.
Esta inusual pareja tuvo 3 bellos hijos y, durante 5 largos años, Yarima se quedó al lado de Kenneth por amor en una sociedad que no comprendía, además nadie hablaba su idioma razón por la cual pasaba mucho tiempo con sus hijos o sola.
En la última visita a la tribu Yarima le confesó a Kenneth que no quería volver a la ciudad, está situación le destrozó el corazón a este hombre quien decidió regresar a Estados Unidos con sus tres hijos.
David, el hijo mayor de la pareja nunca pudo perdonar a su madre, llegó a inventar que había muerto en un accidente para justificar su ausencia, fue sólo cuando viejo, al leer un libro de su padre que era casi una biografía que entendió la gran soledad que había soportado su madre. Sin perder el tiempo, este joven decidió ir detrás de su madre y realizó una verdadera odisea para llegar al corazón de la selva amazónica.
¡Al llegar se reconocieron inmediatamente, fue muy emocionante!
David pasó algunos meses entre los Yanomami, sin embargo, tal cual hizo su madre, este joven tuvo que regresar para su mundo pero con la intención de reencontrarse nuevamente.
“La persona que soy hoy en día es completamente diferente de la que era hace algunos años, ahora estoy orgulloso de ser Yanomami y americano, amo a mi madre y espero poder volver a reencontrarme con ella, así como deseo tener la oportunidad de estudiar sus costumbres”, dijo David.
¡Increíble historia! ¿Verdad?
A continuación le invitamos a ver la siguiente entrevista realizada a David (Inglés):
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