El problema de hígado inflamado también se conoce como hepatomegalia. Esta enfermedad se trata del ensanchamiento o agrandamiento inusual de este órgano. En un estado avanzado y severo, esta condición puede llegar a alcanzar niveles severos que traen como consecuencia fibrosis o cirrosis hepática.
Síntomas del hígado inflamado
El hígado es un órgano que se encarga de diversas funciones del organismo. Una de ellas es la de regular muchas de las sustancias químicas de la sangre. En el caso de tener el hígado inflamado, este trabajo no se puede realizar de manera correcta, por lo que puede afectar negativamente a la salud. A seguir, conoce cuáles son los síntomas de esta enfermedad.
Cambio en el color de las heces o de la orina
Suele ocurrir cuando la bilis se bloquea y no puede ser expulsada por las heces como lo hace normalmente, sino por la orina. Esto produce el oscurecimiento de la micción y la palidez de los excrementos.
Distensión y dolor en la zona abdominal
El recrecimiento del hígado trae molestias en la zona abdominal porque lo abulta e inflama produciendo dolor.
Sensación de malestar
Los problemas hepáticos desarrollan síntomas que suelen confundirse con la gripe común. Alguno de estos son fiebre, dolor de cabeza o fatiga, entre otros.
Náuseas, con vómitos o mareos
Otro de las señales de estar padeciendo hígado inflamado son las náuseas, vómitos o mareos, es decir, problemas digestivos. Esto se debe a que este órgano tiene que procesar la sangre que viene del estómago y de los intestinos.
Pesadez
La sensación de pesadez o ésta en sí es otro aspecto importante. Normalmente, se sitúa en el costado derecho del abdomen.
Ictericia
Ésta tiene lugar cuando la piel y los ojos se tornan amarillos como consecuencia del bloqueo de la bilis.
Mal sabor en la boca
El hecho de que el hígado almacene toxinas y las sustancias que no puede expulsar hacen que la persona tenga mal sabor de boca. No obstante, cabe destacar que el mal aliento no se debe sólo a esta patología.
Conoce aquí las causas y consecuencias del sabor metálico en la boca.
¿Por qué se inflama el hígado? 10 Causas
Debido a que este órgano interviene en diferentes procesos del organismo, las causas que pueden incidir en que se hinche son diversas. Conoce las más comunes, a continuación.
Cirrosis
Las personas que consumen grandes cantidades de alcohol de manera crónica pueden padecer cirrosis. Esta enfermedad suele provocar la inflamación del hígado y puede ser la causante de la muerte de la persona.
Hígado graso
La acumulación de grasa en este órgano puede conllevar una hinchazón del mismo. De la misma manera, las células hepáticas pueden dejar de trabajar correctamente.
Insuficiencia cardíaca
Cuando el corazón no consigue bombear sangre con oxígeno al resto del organismo, el hígado también se ve afectado y se hincha.
Quistes
Los quistes en el hígado, es decir, las pelotas llenas de líquido son otro factor que pueden provocar hígado inflamado.
Intoxicación por medicamentos
Cuando se toman medicamentos en exceso, sobre todo sin prescripción médica, el hígado es uno de los órganos que más se resienten. Como consecuencia, es muy habitual padecer esta enfermedad.
Antecedentes de hepatitis A, B y C
Este virus, el cual se puede desembocar por el consumo de drogas o alcohol, puede ser otra de las causas del hígado inflamado.
Infecciones bacterianas
Infecciones como la sífilis, la tuberculosis o la leptospirosis, entre otras, inciden negativamente en el correcto funcionamiento del hígado.
Sobrepeso y/u obesidad
La obesidad, como es sabido, afecta negativamente a varias partes del cuerpo. Una de ellas es al hígado.
Leucemia
La leucemia hace referencia a una enfermedad de los órganos encargados de fabricar las células sanguíneas. Cuando una persona padece esta dificultad, las células leucémicas se suelen almacenar tanto en el brazo como en el hígado provocando un incremento de tamaño notable de estos.
Enfermedades genéticas
La genética también puede incidir en las enfermedades del hígado. Una de ésta es la hemocromatosis hereditaria la cual hace que el organismo acumule grandes cantidades de hierro. Otra puede ser la oxaluria, es decir, el incremento de ácido oxálico en este órgano.
¿Cuándo consultar al médico?
Si sientes que padeces una molesta en la zona del abdomen muy intensa y permanente, además de experimentar una palidez amarillenta en al piel y ojos, acompañado por inflamación en las piernas, pérdida de apetito y escozor en el cuerpo, acude al médico.
Una vez en el doctor, éste te hará diferentes pruebas para verificar de dónde procede el dolor. Algunas de ellas puede ser una ecografía, una tomografía, una biopsia en el hígado, una resonancia magnética además de exámenes de sangre.
Dieta para el hígado inflamado
Llevar una alimentación adecuada puede ayudarte a combatir este problema. Ésta deberá siempre ir acompañada de deporte y de la supresión de consumos nocivos como el de alcohol y las drogas.
Para iniciar el día, es aconsejable ingerir 1 cucharada de aceite de oliva mezclada con jugo de limón. Esta solución tiene efecto protector del hígado.
Consumir agua de alcachofas con zumo de limón todos los días también beneficiará el alivio del hígado hinchado. Lo más aconsejable es beber entre 3 o 4 vasos por día.
Una ensalada hecha con carlotas rallada y remolacha no puede faltar en tu dieta. Además de ser un plato muy saludable, los minerales y vitaminas que contienen son ideales para combatir los problemas del hígado.
Por otro lado, es esencial incluir carnes blancas, pescados, zumos naturales, frutas, verdura y lácteos desnatados en el régimen ya que son alimentos fáciles de digerir y que no tienen casi grasas.
A la hora de cocinarlos, decántate por hervirlos, asarlos o hacerlos a la plancha. Evita a toda costa que comerlos fritos.
Remedios caseros para el hígado inflamado
Si deseas prevenir el hígado inflamado o aliviarlo de forma natural, existen diferentes remedios para problemas de hígado que puedes usar después de una revisión y aprobación medica.
Un ejemplo son los jugos que limpian el hígado. Estos los puedes preparar todos los días y tomarlo en ayunas. Dichos zumos ayudarán a que mejores varios problemas a la vez. Por ejemplo, el hígado inflamado y los problemas estomacales.
Incluye en tu dieta alimentos como la alcachofa, la cual ayuda a limpiar el hígado y a digerir las grasas que consumimos. La ingesta de cebolla, igualmente, tiene importantes funciones diuréticas y desinflamatorias al igual que los espárragos.
También puedes optar por las infusiones que limpian el hígado . Éstas son de gran ayuda para el tratamiento del hígado graso e inflamado. Las más efectivas suelen ser los tés de cardo mariano, diente de león, regaliz, tamarindo y boldo.
Si quiere conocer más remedios caseros, para finalizar, no dejes de ver el siguiente vídeo: