Los filetes de hígado no suelen ser los más queridos entre las personas. Por el contrario, la mayoría tuerce la nariz al oír hablar de ellos. Pero esta receta de hígado encebollado puede hacer que cambies de opinión.
Esta es una alternativa a las comidas en casa, o para recibir amigos, como refrigerio acompañado con una cerveza y pan. Lo mejor de todo es que hay un consejo infalible que mejora la preparación de esta carne tan injustificada.
Cómo hacer hígado encebollado
Este plato es delicioso y súper fácil de preparar. El tiempo de preparación dura cerca de 1 hora y rinde para 15 porciones. Son una excelente opción para cambiar el menú de tu casa, ya sea para la comida o la cena.
Ingredientes
- Hígado: 300 gramos;
- Leche: ½ vaso;
- Cebolla: 1 unidad grande cortada en rodajas;
- Aceite: 2 cucharadas soperas;
- Sal: al gusto.
Modo de preparación:
1. Limpia el hígado eliminando la grasa y la película que tiene alrededor. Después, córtalo en tiras de poco más de 1 dedo de grosor.
2. Pon las tiras del hígado en un recipiente y cúbrelo con leche y sal. Déjalo reposar en esta mezcla durante 20 minutos en la nevera. La leche hará que la carne sea quede suave y sin el fuerte olor característico del hígado.
3. Después de 20 minutos, escurre la carne en un tamiz, retirando la leche.
4. Calienta en una sartén el aceite y añade el hígado y la cebolla cuando esté caliente.
5. Revuelve la carne en la sartén hasta que notes que el hígado está tierno.
6. Tras esto, el hígado encebollado estará listo. Sólo falta servirlo y deleitarlo.
Sugerencias de acompañamiento
Para que tu hígado encebollado quede aún más sabroso, puedes hacer algunas opciones simples y gustosas para el plato. Si vas a servirlo como refrigerio en una tarde con amigos, basta con un rollo de pan francés. Pero, si deseas servirlo para la comida o la cena, las papas son una excelente opción de acompañamiento.
Este combina con casi todo, además de con varias recetas con patatas. Puedes hacer puré, papas fritas, salteado, aligot (que es un puré de papa con queso), papas rellenas o rústicas.
El arroz blanco, los frijoles, la mandioca, la ensalada y muchos más acompañamientos van bien con esta receta. Simplemente haz lo que más le guste en casa y, seguramente, será una comida deliciosa.