Para a los que les encanta cocinar, nada mejor que tener una variedad de hierbas frescas plantadas para usar como condimento, recién cosechadas. Si te apetece tener un pequeño huerto en tu cocina, pero no sabes cómo lidiar con la tierra, debes saber que puede ser aún más fácil de lo que te imaginas. Conoce unas hierbas para cultivar en el agua y empezar tu producción casera.
¿Cómo cultivar hierbas en agua?
Cultivar hierbas en agua es igual para todos los tipos de hierbas que verás, a continuación. Vas a precisar una ramita de la planta deseada, frascos de vidrio, preferiblemente más oscuros, agua y, algunas veces por un año, de fertilizante líquido para que crezcan mejor.
Solo necesitarás poner agua en el recipiente y colocar la planta adentro, quitando las hojas que hay más abajo y manteniendo a penas la parte superior de la rama. Mantén al sol durante unas 6 horas al día. Si tienes que cambiarlas de localización para que les den el sol, hazlo, ya que la luz natural directa es esencial para el desarrollo de las plantas.
En una tienda agrícola o de flores, adquiere una botella de fertilizante líquido adecuada para plantas de agua y aplícala según las recomendaciones del embase, algunas veces al año. Es así de simple.
Presta atención al control de plagas, que son más difícil de atacar en ambientes interiores, pero puede suceder.
Y también ten en cuenta que es importante quitar las hojas amarillas para dejar la planta sola con las hojas que están sanas.
Hierbas para cultivar en agua
Ahora que ya sabes lo fácil que es cultivar hierbas en el agua, conoce algunos tipos que puedes comprar o recoger en la casa de alguien que conoces para empezar a probar en tu hogar.
Albahaca
La albahaca, además de dejar diversas comidas más sabrosas, también dejará tu cocina con un aroma a hambre. Además de ello, contiene propiedades medicinales que se pueden absorber en forma de té.
Salvia
La salvia es una planta antiinflamatoria que se puede usar como té medicinal, especia para comidas, y también como planta ornamental. Además de ser antiinflamatorio, igualmente es antioxidante, antiséptica, cicatrizante, expectorante y calmante.
Menta negra
Esta es otra planta bonita y aromática, además de ser una fuente de beneficios para mejorar la salud. La menta es buena para las náuseas, protege el sistema gastrointestinal, alivia los dolores de cabeza, aporta más energía y te ayuda a respirar mejor, actuando como descongestionante.
Orégano
Puedes cultivar tu orégano fresco, después cosecharlo y dejarlo secar para usarlo deshidratado, como se hace en las pizzas. Si lo prefieres, también puedes hacer una infusión con hojas frescas, ya que este té un bueno diurético, alivia los síntomas del síndrome premenstrual, fortalezca el organismo y combate hongos y bacterias más leves.
Melisa
Esta es otra hierba que dejará su cocina bien aromatizada. La melisa es un diurética, trata el insomnio y la ansiedad, calma los cólicos y ofrece vitaminas y minerales al organismo. Puedes utilizarla como un té o en recetas dulces, como pasteles y galletas, para que queden aún más deliciosas.
Tomillo
Para tus platos de carne al horno y varios otros, el tomillo es una hierba que mejora el sabor de los mismos. También puedes usarlo como té, ya que es otra opción medicinal. El tomillo enriquece la salud con muchas vitaminas y minerales, fortaleciendo los huesos, protegiendo contra los hongos y bacterias, al mismo tiempo que ayuda a proteger el cerebro.
Romero
Esta planta linda y aromática se puede usar en recetas dulces y saladas, en infusiones y también en jabones caseros. El té de romero es bueno para el sistema respiratorio, ayuda a mantener una presión equilibrada, es diurético, mejora el estado de ánimo y ayuda a desintoxicar el organismo.