Julia Price había salido un día, como todos los días, a practicar su rutina de ejercicios, la cual consistía en salir a correr. Habituada ya a esta tarea, salió confiada y ligera. Pero ella no esperaba lo que le sucedería después.
Mientras corría por el parque, Julia comenzó a sentir que alguien la llamaba. Parecía un hombre mayor y muy bien vestido, como de jornada laboral, y su llamado era sumamente insistente.
Según el testimonio de Julia, ella estaba corriendo muy tranquilamente, y además, llevaba puestos los audífonos. Eso implica que para que ella hubiera podido escuchar a aquel hombre llamarla, es porque seguramente él estaría gritando fuertemente. O bien tendría una emergencia, o bien se trataría de un abusivo. Y claro, fue lo segundo.
El hombre gritaba “¡Hey, chica sexy!” una y otra vez para llamar su atención. Lo único que se le ocurrió a Julia fue hacer lo que hace la mayoría de las mujeres frente a esas situaciones: ignorar el suceso. Pero esto no siempre es lo adecuado.
El hombre enfurecido, comenzó a agredirle verbalmente. Gritaba “¡Mira, estúpida p…!” Esa palabra sacó de sus casillas a Julia, quien se quitó los audífonos y estaba dispuesta a defenderse de ese agresor. Pero ella no estaba sola.
A unos metros, un niño, acompañado por su familia, estaba viendo la escena. Lo presenciado despertó su indignación e, inmediatamente, salió a la defensa de Julia. “¡Hey!” le dijo, “No tiene nada de bonito que le diga eso a una mujer y no me parece correcto que le grite… Ella es una buena persona, y no puedo consentir que le grite de esa manera… Ella es como mi hermana y la pienso proteger.”
Al escuchar esto, no solo Julia se sorprendió, sino que el agresor se vio desenmascarado y, de inmediato, se retiró del lugar.
Conmovida, Julia le pidió permiso a la madre del chico para darle un abrazo de agradecimiento. Luego, compartió su historia en Facebook, la cual ha generado más de un millón de visitas.
Si Jaimie hizo esto, es sin duda porque sus padres lo han formado bien en valores, y le han enseñado a superar todos los estigmas machistas que aun se ven por ahí. Si comportamientos como este se extienden, el mundo, definitivamente, podría ser mucho mejor. Por eso, ¡comparta este artículo!
Vea en el siguiente vídeo cómo una mujer le responde a sus agresores en la calle: