El glifosato es una sustancia química que se relaciona con el desarrollo de algunas enfermedades, entre ellas el cáncer. Esta herbicida, que es absorbida por la parte de las raíces y de las hojas de las plantas, se puede colocar en las hojas, inyectar en los tallos y los troncos o ser rociada encima de la hierba.
Estudio sobre el glifosato
El grupo Environmental Defence Canada elaboró un estudio sobre el químico en el que descubrió que de los 18 productos testados, sólo 4 no lo contenía esta sustancia, la cual se usa encubierta bajo el nombre de Roundup. Esta institución destacó que el herbicida es dañino para el organismo.
En esta línea también está el estudio de la The Internaional Agency for Research on Cancer. Esta agencia clasifica la sustancia química en un compuesto, probablemente cancerígeno, para los humanos.
Estas 2 corrientes de investigación se han visto reforzadas, recientemente, con la condena del jurado de California a Monsanto. A la compañia se le ha impuesto el pago de una indemnización de 289 millones de dólares a un jardinero de San Francisco que ha padecido cáncer, aparentemente, por culpa de la exposición al glifosato.
Las afirmaciones expuestas con anterioridad, van en contra de lo que manifiestan compañías como Bayer. Ésta insiste en que el glifosato no produce perjuicio ninguno para la salud.
¿Qué es el glifosato?
El glifosato es un compuesto químico o herbicida que se usa para pulverizar algunos cultivos que no son alterados genéticamente. Uno ejemplo son el azúcar en caña, la avena, el trigo, la cebada, la soja o las arvejas. Asimismo, esta sustancia es empleada para eliminar las plantas que modifican el ecosistema.
Consecuencias y enfermedades
Los efectos secundarios de la ingesta de glisofato para la salud pueden ser letales debido a todas las enfermedades y complicaciones que cabe la posibilidad que aparezcan.
Como ya se ha mencionado con anterioridad, el cáncer es una de las dolencias que se relaciona con el contacto del glisofato. Éste produce deterioro en el ADN, especialmente en la población agrícola.
El consumo de este químico promueve la disbiosis intestinal, es decir, una de las consecuencias que van asociadas al autismo. Asimismo, el herbicida activa el almacenamiento de alumino en el cerebro, o sea, del veneno principal del surgimiento de esta dolencia.
La posibilidad de sufrir de celiaquía también se da por causa del compuesto químico dado que su ingesta produce la oscilación de las bacterias intestinales. Éstas forman parte de la desintoxicación de toxinas ambientales.
Los defectos de nacimiento son otro problema que va de la mano por culpa del herbicida. Ésta tiene la capacidad de paralizar la transmisión de la vitamina A, la cual es vital para que el feto crezca sano.
El Parkinson, igualmente, puede aparecer por el glisofato. Dicha sustancia ayuda a que la muerte celular se agudice.
La depresión, una enfermedad que podría ser una epidemia en el 2020 a nivel mundial, también ocurre por causa de este químico. El herbicida perjudica la fabricación de serotonina, o sea, del neurotransmisor responsable de mantener una salud mental adecuada.
¿En qué países está prohibido?
En la actualidad, este químico se gasta en cultivos y a nivel mundial. Por eso, su uso es tan polémico. Si se prohíbe su comercialización, muchas empresas pueden llegar a tener muchas pérdidas. De ahí que, a pesar de que hayan investigaciones que certifican que su utilización no es inocuo, se sigue empleando.
Por ejemplo, en 2015 la Corte Constitucional de Colombia prohibió su empleo. No obstante, poco tiempo después, el Consejo Nacional de Estupefacientes revivió el riego.
Argentina es otro país donde el uso de este químico es muy polémico. Todo y que algunos agricultores no quieren utilizarlo, los patrones se niegan a no emplearlo a pesar de que haya alcaldes que, a nivel local, intenten parar su gasto. Pero dado que no hay una ley nacional, poco pueden hacer.
La Unión Europea en 2017 renovó la licencia por 5 años más de la utilización del químico. Sin embargo, dejó vía libre a cada país miembro para su prohibición. Acogiéndose a este poder unilateral de decisión, Francia ha prometido vetar el gilfosato a partir de 2021, en algunos casos. No será hasta 2026 cuando lo vede por completo.
En 2015 el gobierno de Sri Lanka dejó de autorizar la importación del químico. A pesar de eso, en julio de 2018, tras muchas quejas por parte de las organizaciones agrícolas, volvió a permitir el uso, pero sólo en los cultivos de caucho y té.
Por último, gracias al próximo vídeo podrás saber porqué la compañía Monsanto ha estado envuelta en una polémica al ser encontrado glifosato en los cereales.
