Con el aumento del comercio y la creciente industrialización, la oferta de alimentos se ha incrementado y se ha hecho más variada y especializada. En la actualidad, como nunca antes, circulan productos de las más diversas procedencias y están al alcance de un mayor número de personas. Entre tantas alternativas, sería muy fácil perderse si no existieran las etiquetas de los alimentos para estandarizar la información sobre su contenido.
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¿Por qué es importante leer las etiquetas de los alimentos?
La razón es muy simple y muy importante. Las etiquetas de los alimentos permiten que el consumidor sepa qué está comprando. Si se sabe entenderla, un simple vistazo basta para tener una idea clara de los ingredientes utilizados y sus valores nutricionales. De esta manera, pueden evitarse alimentos potencialmente perjudiciales y saber a ciencia cierta qué contiene la comida.
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Lo que se debe buscar en las etiquetas de los alimentos
Aunque hay diferencias en las legislaciones de cada país, la industria alimenticia ha ido progresivamente unificando sus criterios para presentar la información nutricional de los alimentos. Por ley, las etiquetas deben mostrar la información relevante de acuerdo con parámetros determinados que facilitan su comprensión. Lo que sigue son algunas consideraciones en torno a cómo leer las etiquetas de los alimentos envasados y qué encontrar en ellas.
Denominación
El nombre del producto debe ocupar un lugar central y estar expresado de forma clara y concisa. De esta manera, los consumidores saben qué compran y evitan posibles confusiones con sus riesgos potenciales. La denominación también debe indicar el peso neto y bruto del alimento en una medida convencional. Normalmente se trata de kilos, gramos, litros y mililitros.
Ingredientes
Los componentes del alimento se ordenan de acuerdo a su cantidad. Los primeros están presentes en mayor proporción que los últimos. Cualquier aditivo químico que funcione como conservante, colorante, aromatizante o saborizante debe estar especificado en la lista de ingredientes.
Información nutricional
Aquí se especifica la concentración de nutrientes en una porción determinada. Se señala cuánta grasa, carbohidratos y proteína contiene esta porción. También se indica la cantidad de sal, azúcar, el valor energético y calórico del alimento. Por lo general, se emplean unidades de medida como gramos o miligramos.
Advertencias
En esta sección de las etiquetas de los productos de alimentación se especifican los posibles riesgos asociados a su consumo. Desde la presencia de ingredientes alérgenos hasta precauciones y contraindicaciones para personas con condiciones específicas de salud. Se incluye también la fecha de fabricación, caducidad y los métodos ideales para la conservación del alimento.
Procedencia
El nombre del fabricante, su dirección y el país de origen son los datos de procedencia de un producto determinado. Además, los rótulos de los alimentos deben incluir los números de registro sanitario para asegurar que son aptas para el consumo humano.
Consejo final: Infórmate
Si no conoces un nombre en la lista de ingredientes, investiga e infórmate utilizando la internet. No son pocos los casos de fabricantes inescrupulosos que emplean sinónimos para referirse al azúcar o las grasas saturadas.
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Para terminar, no dejes de conocer en el siguiente video qué piensa Sascha Fitness sobre las etiquetas y la información nutricional que contienen.