La familia de Lily celebraba la Cena de Acción de Gracias como todos los años, su madre se había encargado de preparar un delicioso pavo. Su padre solía burlarse de su esposa casi todos los días y cuando tenían una cena familiar, Lily tenía siempre mucho miedo de que hiciese pasar a su madre algún tipo de vergüenza, sabía que si esta vez lo hacía ella no podría contenerse.
Llegó la hora de la cena y todos los invitados, entre ellos primos, abuelos y tíos se encontraban disfrutando de la rica comida. Ya casi al finalizar la cena, cuando estaban comiendo postre y tomando café, ya el padre de Lily había empezado con los chistes de mal gustos, algunos de ellos enfocados contra su esposa. Lily se contuvo para evitar alguna escena desagradable que pudiese dañar el momento, pero hubo un chiste que terminó con su paciencia.
Su padre había decidido explicar frente a toda la familia la diferencia entre los tipos de senos de las mujeres en sus etapas de la vida y empezó: “Cuando tienen 18 años parecen unos melones, caracterizados por su firmeza y redondez, a los 35 años parecen unas peras, todavía bonitas pero cuelgan un poquito. El problema es a los 50 años, la edad de mi esposa, de hecho describiré los senos de mi esposa, a esa edad son como cebollas” los oyentes preguntan: “¿Cebollas?” y él responde: “Sí, cuando las ves no haces más que llorar”
En ese momento Lily no se contuvo más y dijo frente a todos: “¿Saben cuantos tipos de penes hay?, a los 18 años son fuertes como un roble, a los 35 son flexibles pero pueden mantenerse, el problema es a los 50 años, la edad de mi padre, a esa edad son como un árbol de navidad”
“¿Cómo un árbol de navidad?” preguntan todos. A lo que Lily responde: ” Sí, totalmente muerto desde la raíz a la punta, además con unas lindas bolas que sólo sirven de decoración”.
En ese momento su madre sólo pudo ver para ella y sonreír con complicidad.
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