A veces, incluso se confunden los nombres y síntomas de diferentes lesiones porque son complicadas, y al mismo tiempo muy similares, como con la bursitis y la epicondilitis lateral.
Ambas son inflamaciones que ocurren por movimientos repetitivos, pero de verdad la epicondilitis es más específica.
¿Qué es la epicondilitis lateral?
La epicondilitis lateral, como lo llaman los médicos, o el codo de tenista, como se le conoce popularmente, es una inflamación que ocurre en los tendones de los músculos extensores de la muñeca.
Esta ocurre después de un esfuerzo repetitivo de esos músculos, que se extienden desde la muñeca hasta el codo, y causa microdesgarros internos que desencadenan el proceso inflamatorio.
Por esta razón se llama codo de tenista, ya que estos atletas hacen fuerza repetitiva con sus puños, y es común desarrollar el problema.
Pero no solo los tenistas tienen dolor en el codo. Las personas que trabajan escribiendo, pintando o digitalizando, además de las que van al gimnasio más de 5 veces por semana, también están en el grupo de riesgo.
Síntomas
Si sospechas que puedes tener epicondilitis lateral, notarás los siguientes síntomas:
Disminución de la fuerza en la muñeca o el brazo, lo que dificulta sostener un vaso de agua durante más de un minuto;
Dolor en el codo, específicamente en el exterior cuando la mano está mirando hacia arriba, cada vez más intensa al apretar las manos, peinarte, abrir la puerta o digitalizar.
Los síntomas pueden no ser aparentes y surgir gradualmente, pudiendo llevar semanas o meses.
Tratamiento para la epicondilitis lateral
Se puede tratar y curar la epicondilitis con una combinación de medicamentos y fisioterapia. Solo en los casos más graves, donde hay una ruptura de ligamentos más agresiva, puede ser necesario operar.
Conforme la gravedad del caso, el tratamiento puede durar de 8 semanas a meses. Además de la fisioterapia y los medicamentos antiinflamatorios, la acupuntura también puede ser útil, así como la cinta Kinesio, las cuales ayudan a mantener el área restringida de movimientos incorrectos.
Durante el tratamiento, se recomienda detener las actividades que causaron la epicondilitis.
Consejo: Ejercicios para prevenir
Si formas parte del grupo de riesgo, mira qué ejercicios puedes hacer diariamente antes de comenzar a trabajar:
