Dos cunas, un cochecito doble y mucha, mucha ropa ya lavada, planchada y ordenada para esperar a sus gemelos. Momentos de expectación y miedo siempre acompañan a una mujer embarazada, sumados a la alegría de la preparación. Toda la familia está más unida y el tema central pasa a ser el bebé, en este caso, los dos.
Imagina la frustración de esta madre y de toda la familia cuando descubrieron que no había dos bebés en el cuarto. Toda esa preparación había sido no solo una pérdida de expectativas, tiempo y dinero, sino también de sueños dejados atrás. Un ruido sordo, aún sin explicación lógica o convincente.
La mujer embarazada de gemelos recibió sólo a un bebé tras el parto
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Aline Parreira de Jesus fue al Hospital Municipal Antônio Martins da Costa en Goiás para dar a luz a sus gemelos llena de alegría y expectativas. Pero las cosas no salieron bien según lo planeado. Primero, no le dejaron que tuviese ningún acompañante durante el parto, lo cual está garantizado por la ley. Se trata de un acto de violencia obstétrica, impidiendo que las mujeres tengan apoyo emocional.
En seguida, durante el parto, se le administró anestesia mucho más fuerte de lo necesario, lo que provocó que se durmiese temprano. De esta manera, la madre no pudo seguir nada de lo que estaba sucediendo y, menos aún, ver la cara de sus bebés poco después de que nacieran. Escuchar su primer llanto tampoco fue posible.
Para colmo, al despertar en su habitación, solo tenía una cuna con uno de sus hijos. Ningún médico o enfermera podía explicar lo que realmente sucedió, lo que hizo que Aline se desesperase. Estaba segura de que eran dos bebés, porque se realizó 3 ultrasonografías en diferentes laboratorios donde se podían escuchar los pequeños corazones.
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De acuerdo con el hospital, todo esto fue un malentendido. Los exámenes anteriores habrían dado un diagnóstico falso. Sin embargo, otro hecho ayudó a complicar la versión de los médicos, porque en el momento del alta, la madre recibió dos declaraciones de nacidos vivos. El hospital alegó haber estado confundido porque habían perdido el primero e hicieron otro, el cual encontraron en seguida.
El caso fue llevado a la estación de policía y la jefa Simone Casemiro Campi está investigando el caso. En principio, esta no cree en la versión del diagnóstico erróneo, pero está investigando el caso para estar más segura de qué fue lo que pasó. La abogada de familia, Sandra Garcia de Oliveira, dijo que los exámenes aclaran la imagen, el peso, las medidas y los latidos de los dos bebés.
Ahora sólo queda esperar para ver el resultado de las investigaciones. No obstante, se están planteando muchas teorías. Se habla de error médico, mala práctica e incluso tráfico de personas. Tesis muy fuertes que implican mucha responsabilidad. Para ti, ¿qué pudo haber sucedido realmente? ¿Las tres pruebas fueron realmente incorrectas o ocurrió algo en el hospital?