Los perros son los mejores compañeros del hombre, sin duda alguna. Muchas familias no resisten la tentación de adoptar a un can, porque la ciencia concuerda en que el desarrollo de los hijos es mucho más saludable cuando tienen una mascopta con la cual jugar.
Pero sobre algunas razas de perros vela a veces una sombra de sospecha, porque su aspecto es aparentemente feroz o fuerte, como el caso de los doberman, pitbull, etc.
A pesar de eso, consciente de que no hay perro naturalmente feroz sino mal educado, Catherine Svilicic había adoptado recientemente a un dóberman en un refugio de animales, que lo había rescatado a su vez de un hogar donde recibía maltratos.
Ya en el cuarto día de su estancia en aquella casa, el perro, llamado Khan, había demostrado ser un gran compañero para su niña, que tenia una edad de 17 meses en aquel entonces. Así que no vieron problema en dejarlos jugar juntos. Pero algo terrible sucedió de un momento a otro.
Un día Catherine dejó a su hija jugar en el jardín con el perro, mientras los vigilaba de lejos. Sorpresivamente, y en cuestión de segundos, el perro se puso agresivo y golpeó a la niña, mientras trataba de empujarla. Al no poder cumplir su objetivo, le mordió en el pañal. Inmediatamente, se oyó que el perro lanzó un aullido estremecedor y se apartó.
Catherine salió corriendo, atemorizada por la agresión del perro, pero cuando llegó al lugar, descubrió lo que realmente pasaba: había una serpiente cerca de la niña, y Khan había luchado por alejarla de aquel peligroso y mortal reptil. Pero el perro sufrió la mordida en lugar de la niña. Lo que parecía un ataque, era en realidad un acto protector de Khan hacia Charlotte, la pequeña de Catherine Svilicic.
Impactada por lo sucedido, Catherine llevó al perro a las emergencias veterinarias, donde pudieron aplicarle un suero antiofídico a tiempo y lograron salvar al animal. Desde ese momento, toda duda sobre Khan fue despejada. ¡Khan se volvió el héroe de la familia!
¿No es sorprendente como nuestros amigos peludos se sacrifican por nosotros? ¡Comparta esta historia con sus amistades!
