Cuando una persona va a la consulta de un nutricionista o a un médico, una de las cosas que le suelen prohibir en su alimentación es la ingesta de alcohol. Las bebidas alcohólicas contienen una gran cantidad de azúcar (entre otros componentes dañinos), sustancia que no es buena para el organismo si se toma en exceso. Sin embargo, existe una excepción. Según un estudio, desayunar cerveza es tan bueno como comer un yogur.
La cerveza es tan sana como un yogur
Si eres un fanático de la cerveza, entonces sigue leyendo, es probable que las siguientes líneas alegren tu semana o tu mes. Tomando como base la investigación realizada por el científico holandés Eric Claassen, sobre que “desayunar cerveza es tan bueno como un yogur”.
El especialista, que trabaja en la Universidad de Ámsterdam, reveló que algunas cervezas tienen levaduras probióticas y bacterias, sustancias que son buenas para la salud. Asimismo, destaca que esta bebida puede ayudar a dormir mejor en la noche y también a combatir la obesidad.
Sin embargo, es necesario tener en consideración que estas ventajas no las encuentras en todas las cervezas del mercado. A penas, en aquellas que se encuadran como “saludables”. Según apunta el hallazgo. Sólo las marcas belgas Hoegaarden, Westmalle Tripel y Echt Kriekenbier fueron indicadas por los expertos. Esto es porque en su composición están llenas de levaduras probióticas y con un gusto más marcado.
Otra de las disimilitudes con las otras cervezas es que, las mencionadas, presentan una doble fermentación. La primera se da en la cervecería y la segunda en la botella.
“En altas concentraciones, el alcohol es malo para el intestino, pero si se bebe solo una de estas cervezas todos los días, sería muy bueno para el organismo”, explicó el holandés.
El poder de los probióticos
De la misma forma que sucede con los yogures probióticos, dichas bebidas alcohólicas eliminan las bacterias menos buenas, las cuales se vinculan a dolencias como; el cáncer de intestino, el autismo y el Alzheimer.
Cabe destacar que ya en la Edad Media se hacía cerveza con probióticos, dado que el agua no era potable. Entonces, con las levaduras se mataban las bacterias malas que había en el agua. Ya cuando se descubrió el proceso de pasteurización, casi todas las cervezas dejaron de ser probióticas.
Claassen aconseja añadir una dosis pequeña de las cervezas belgas al día. Otros de los productos que se recomiendan, dado que son una fuente en probióticos son el ajo, los alcauciles, los espárragos y la cebolla.
Fuente: Cucinare
Importante: Siempre que consumas una bebida alcohólica, hazlo con moderación. Su ingesta excesiva podría acarrearte graves problemas de salud.
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Para finalizar, descubre cómo servir correctamente una cerveza en el próximo vídeo.
