Cada relación es diferente, dado que ninguna persona es igual. Las parejas establecen unas normas o límites para que su unión sea fructífera y ellos sean felices. Sin embargo, existen casos en los que una persona está subordinada a la otra. Y esto no es nada bueno. Cuando esto ocurre, el individuo es inseguro y le da mucho miedo vivir sin su compañero/a de vida, ya que piensa antes en el otro que en sí mismo. Esto es un claro síntoma de ser dependiente emocionalmente. Para evitar esto, descubre unos consejos que te ayudarán a dejar de tener dependencia emocional.
Consejos para dejar de tener dependencia emocional
En el momento en el que se confunden las barreras del amor con la sumisión, se presenta un problema. Sin saberlo, la persona se vuelve subordinada de la otra y su estado de ánimo siempre va a depender de cómo esté su pareja. Asimismo, se considerará inferior y que no merece al cónyuge que tiene, sentirá pavor al desamor y, por encima de todas las cosas, perderá su propia identidad, ya que dejará de ser ella misma.
Es por ello, que los consejos para dejar de tener dependencia emocional son de gran utilidad si te identificas con este tipo de personas que están subordinadas a su pareja.
Di lo que piensas
Tú tienes voz y voto. Es evidente que pueden darse situaciones en las que tus ideas, pensamientos, sentimientos u opiniones no agraden a tu pareja. Pero eso no significa que te tengas que callar por miedo a perderlo.
Debes exponer siempre lo que sientes, y nunca perder tu esencia ni tu identidad. Recuerda que fue tu manera de ser lo que le gustó de ti cuando te conoció. El diálogo es fundamental en una relación, y siempre se debe charlar de todo para llegar a entendimientos.
Piensa en ti
Para dejar de tener dependencia emocional, es más que fundamental que pienses en tu bienestar. Cuando se está sujeta a otra persona, el temor a perderla hace que uno deje de pensar en el propio bienestar. Pero si no haces cosas por tu salud mental y física, al final de cuentas, quien saldrá perdiendo y podrá caer enfermo serás tú. Por lo tanto, queda con tus amigos/as, sal de compras, ve al gimnasio y haz las actividades que siempre te han gustado. Ni que hablar de que te vistas como te gusta y que no permitas que nadie te diga cómo tienes que actuar.
Una vez que empieces a tener vida social y realizar todo aquello que te gusta y te hace feliz, verás que te sientes mucho mejor y que la confianza que habías perdido en tu persona la recuperas.
Trabaja la autoestima
Antes de amar al otro, te tienes que amar a ti mismo. Comienza por tomar tus propias decisiones sin tener que tener la aprobación de tu pareja. Ten la iniciativa de empezar el proyecto que te ronda la mente, y si sale mal, por lo menos lo intentaste, pero no te quedaste con la duda.
Motívate con sueños, metas, objetivos y cosas que te hagan crecer como persona. De esta manera, descubrirás que eres mucho más valioso de lo que creías y aprenderás muchísimas cosas, incluso de tu persona.
Socialízate
El estar en contacto con otras personas, aparte de tu pareja, será bueno para que tu mente esté ocupada. Además, esto hará que puedas expresar tus sentimientos, escuches la opinión de otras personas, y seas consciente de cuan dependiente eres y de lo tóxica que puede llegar a ser tu relación y perjudicial para ti si sigues por ese camino.
Igualmente, el hecho de no estar las 24 horas pegados como lapas ni pensando en él o ella, hará que los momentos que estéis juntos los disfrutéis al máximo y que vuestra unión se vuelva más saludable.
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No te crees falsas expectativas
Cuando tú ofreces mucho, inconscientemente esperas que el otro haga lo mismo contigo. Pero no siempre es así. Por lo tanto, lo mejor es que dejes de idealizar a tu pareja, que seas realista y no te crees expectativas falsas. Tú haz lo que consideres que debes hacer, sin esperar nada a cambio.
Sé una persona independiente
Estar en pareja no es sinónimo de que no seas una persona libre e independiente. Ambos podéis hacer cosas por separado y no hay necesidad de que seáis siameses y estéis las 24 horas del día. Tampoco es necesario que estés controlando qué está haciendo tu pareja todo el rato. Por lo tanto, nada de mandarle mensajes o llamarlo en todo momento. Cuando paras de hacer eso, habrás realizado un gran paso para dejar de tener dependencia emocional.
No te obsesiones con el futuro
Puede parecer un tópico, pero es una verdad como un templo: nadie sabe lo que puede pasar mañana. Un claro ejemplo en este 2020 es la pandemia que está azotando el mundo entero por culpa del coronavirus.
Por eso, es mejor que vivas el día a día, que dejes de obsesionarte y amargarte pensando si mañana te va a dejar, y que centres todas tus fuerzas y energías positivas en ser feliz hoy y disfrutar cada momento que la vida te regala como si fuera el último.
Tampoco estés pensando en el pasado, en experiencias con otras parejas. Lo que te ocurrió anteriormente es un capítulo cerrado, y no puedes reflejar en tu compañero/a actual aquello vivido años atrás.
Acude a sesiones de terapia
Los profesionales están ahí para algo. Acudir a un especialista puede ser de gran ayudar para mejorar tu relación, aprender a no ser dependiente, además de para tener la valentía de hablar con tu pareja y explicarle el problema que tienes.
Para finalizar, en el siguiente vídeo se exponen otras claves que también son de ayuda para superar la dependencia emocional.
