Hace 9 años Christopher Mirasolo cometió el terrible acto de violar a Rebecca, una niña de tan sólo 12 años. Lamentablemente para ese momento ya la niña se encontraba en su etapa fértil y quedó embarazada del agresor.
A pesar de lo difícil que fue, la niña decidió continuar con su embarazo y tener a su bebé. Hoy en día la joven intenta no recordar que su hijo fue producto de la agresión sexual de su niñez, lo ama y protege como si eso no hubiese sucedido.
Hace un año la vida le cambió nuevamente, pero esta vez a ella y a su pequeño hijo de 8 años. Christopher salió de la cárcel luego de haber sido condenado a 4 años de prisión por haber violado a otro niño y tenía la firme intención de solicitar a un juez la custodia de su hijo.
Parece impensable que el juzgado haya podido dictar una sentencia a favor de Christopher, pero de forma inexplicable ocurrió así. Ahora tendría la mitad de los derechos y responsabilidades sobre su hijo.
El juez Gregory S. Ross no sólo fue capaz de favorecerlo con la custodia, si no que lo añadió al certificado de nacimiento del niño y peor aún ¡le dio su dirección de domicilio!.
Rebecca no puede creer lo sucedido, denunció el hecho ante las autoridades y se encuentra a la espera de las próximas medidas a llevar a cabo. En un mes un nuevo juzgado emitirá una nueva sentencia.
A continuación le invitamos a ver el siguiente video con más información sobre el caso (inglés):
¡Comparta este artículo!
