Independizarse implica un cambio muy grande en la vida de una persona. Este nuevo comienzo conlleva mayor libertad, incluso para elegir los muebles y demás elementos decorativos de tu hogar. Sin embargo, en el caso de que te mudes a vivir sola, el riesgo de que te puedan robar aumenta. Por eso, es bueno que conozcas unos consejos de seguridad para las mujeres que viven solas.
Consejos de seguridad para las mujeres que viven solas
Como dice el dicho, “es mejor prevenir que curar”. Luego, si vives sola, es crucial que tengas en cuenta unas precauciones que ayudarán a reducir el riesgo de que un ladrón haga acto de aparición en tu casa.
No es necesario que entres en pánico y que tu paz se perturbe al pensar que podrías ser el blanco de los atracadores. Existen unos consejos de seguridad para las mujeres que viven solas que te permitirán vivir tu independencia de una forma segura.
Ilumina bien tu casa
Ilumina bien tanto la entrada como en el jardín de tu vivienda. De esta forma, estarás reduciendo las chances de que alguien se esconda en un punto sin luz y te sorprenda negativamente.
Instalar una alarma con sensores de movimiento en el exterior de la casa también es una opción muy buena.
Pon una mirilla en la puerta
Quizás ya tengas una. Pero, si no es así, es el momento de que la coloques. Además de esto, recuerda que si no estás segura de quién está al otro lado de la puerta nunca debes abrirla.
Familiarízate con el vecindario
Otro de los consejos de seguridad para las mujeres que viven solas es el de estar familiarizada con tu entorno. Esto incluye las caras de tus vecinos, nombres y sus vehículos. Luego, si ves el rostro y/o el automóvil de alguien que no es conocido, podrás estar más alerta y tomar las precauciones necesarias.
Mantente en contacto con tus allegados
Un truco para sentirte segura es el de establecer un horario para llamar a algún familiar o amigo. Entonces, si te pasa algo, la persona se dará cuenta al no conseguir contactarse contigo.
No escribas tu nombre completo en el buzón
Tanto en el buzón como incluso en el timbre, hay personas que colocan su nombre y apellidos. Como método de prevención para evitar que te pase nada, escribe solo las iniciales de tu nombre y apellidos. Esta anotación será más que suficiente para que el cartero sepa cuál es tu buzón y, al mismo tiempo, no estarás poniendo sobre aviso a los ladrones que eres una mujer.
Cabe destacar que las mujeres tienen más posibilidades de sufrir un robo. De ahí que no alertes a nadie que eres una chica y que vives sola.
Ten el teléfono siempre cerca
Tener el móvil cerca de ti a mano te permitirá avisar en seguida a alguien en caso de emergencia.
Coloca rejas en las ventanas
Las rejas te aportarán seguridad, tanto cuando estés en casa como cuando no. Sobre todo, si vives en un bajo, la protección en las ventanas no puede faltar.
No dejes objetos de valor a la vista
Si dejas a la vista objetos de valor, estarás atrayendo la atención de los atracadores. Cierra las cortinas al irte a dormir y cuando salgas de casa e intenta guardar todo aquello que pueda ser atractivo para los ladrones.
Ten una copia de las llaves
Haz una copia de tus llaves y déjalas en casa de una persona de confianza. Así, si te pasa algo, alguien podrá entrar a la vivienda para ayudarte.
Asimismo, es bueno por si te olvidas de las llaves dentro de casa o las pierdes. También es aconsejable que antes de cerrar la puerta compruebes que tienes las llaves contigo.
Revisa las ventajas y las puertas
Cuando vayas a salir de casa y antes de irte a la cama, verifica que las puertas y ventanas estén cerradas correctamente. Esta actitud, además de ser un acto de seguridad para evitar la entrada de ladrones, te estará protegiendo de posibles daños como, por ejemplo, la entrada de agua si empieza a llover.
Anota los números de emergencias y tenlos a mano
Ante cualquier posible eventualidad, tener a mano los números de emergencia te permitirá actuar con rapidez. Hay que señalar que estos números hacen referencia a los bomberos o policía así como el de algún familiar y/o amigo que viva cerca y pueda acudir a tu rescate.
Desconfía por principio
Si recibes la visita de un empleado de una compañía eléctrica, por ejemplo, o alguien te llama por teléfono para venderte algo, ¡desconfía! No te fíes de personas que no conoces y quieren entrar en tu casa o saber información sobre la vivienda y cuántas personas viven en ella.
Quizás sean falsos comerciales que quieren saber datos para que luego les sea más fácil entrar a la vivienda y robarte.
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