La hora de poner a los pequeños en la cama, en muchas casas puede llegar a ser una gran lucha, por no decir uno de los momentos más difíciles del día. Los nenes nunca se cansan y desean jugar durante más tiempo y no quieren irse a dormir. Sin embargo, es fundamental que duerman las horas necesarias para su edad. De lo contrario, esto puede afectar a su salud. Conoce, a seguir, cuáles son las consecuencias de acostar tarde a los niños.
Cuáles son las consecuencias de acostar tarde a los niños
El descanso en los niños se puede equiparar a la importancia de que lleven una alimentación saludable y equilibrada para que su desarrollo integral no se vea afectado. Es por ello que los pequeños deben descansar adecuadamente. Además, al dormir bien, su rendimiento mental al día siguiente será el correcto ya que su mente estará despierta, alerta y calmada.
Igualmente, el sueño puede influir de manera negativa en las habilidades físicas de los más pequeños de la casa, teniendo en cuenta lo que apuntan algunos estudios. Mientras los nenes duermen, los músculos se liberan de las tensiones que han tenido durante el día, y se recuperan para estar listos para el día siguiente. Esto es fundamental para que puedan hacer deporte, juegos y demás actividades escolares. Pero si no duermen lo suficiente, el organismo no consigue liberar dichas tensiones.
Dicho esto, conoce otras de las consecuencias de acostar tarde a los niños.
Modorra
Si un niño se va tarde a dormir, durante el día puede padecer lo que se conoce como somnolencia diurna. La consecuencia de esto es que estará más cansado por el día, además de que tendrá ganas de dormir en todo momento.
Según han apuntado algunas investigaciones, la somnolencia diurna está vinculada con el desarrollo de problemas tanto de comportamiento como de concentración.
Problemas para concentrarse
Tal y como se mencionó en el punto anterior, una de las consecuencias de acostar tarde a los niños puede ser que estos tengan dificultades para concentrarse. Se debe tener bien presente que no dormir bien conlleva efectos negativos sobre la salud mental de los menores.
Ya algunos hallazgos han puesto de manifiesto que el hecho de que los nenes no duerman las horas suficientes puede ser la causa de la falta de atención en las aulas. Asimismo, este hecho puede ocasionar que sean menos activos, además de más holgazanes.
Incremento el riesgo de obesidad
Otros estudios han revelado que la falta de sueño en los niños incrementa las chances de que padezcan obesidad infantil. Cabe destacar que las posibilidades de que padezcan obesidad o sobrepesos aumentan incluso más si los pequeños tienen malos hábitos como puede ser el sedentarismo.
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Sensación de agotamiento
Dado que no duermen lo suficiente, la falta de sueño hace que los niños tengan la sensación de cansancio, además de sentirse débiles.
Asimismo, puede haber casos en los que entren en un estado de ansiedad o hiperalerta. Esto es preocupante dado que con el tiempo se puede convertir en trastornos del sueño mucho más complicados de remediar.
Consejo final:
Es fundamental que crees una rutina cuando vayas a acostar a tus hijos para que estos vayan asociando que llega la hora de dormir. Asimismo, su cuarto debe ser un lugar libre de distracciones. Por lo tanto, no debe haber ordenadores, televisiones, móviles, tablets, videoconsolas u otros dispositivos que les puedan alterar el sueño.
Entre las 19:30 y las 20:30 es la hora en la que los pequeños deberían estar en la cama ya durmiendo.
Para finalizar, en el siguiente material audiovisual puedes conocer más datos sobre la importancia de dormir en los niños.