El protagonista de esta historia es Wellington Gomes, quien como muchos otros pasó largos años de su vida trabajando como cortador de caña en el interior de Brasil. Este hombre contó que desempeñaba estas funciones para ser un aporte para su familia, pero que su verdadera pasión era contribuir en la sociedad.
Luego de darle muchas vueltas y con gran esfuerzo, no sólo de él, sino también de su familia completa. Este hombre consiguió entrar a la facultad de medicina de Pernambucana. Así fue como Gomez inició un camino lleno de sacrificio para cumplir un sueño, curar personas.
El hombre cuenta que: “cada año de estudio tuve que adaptarme a los transportes públicos y a intentar conciliar la vida de estudiante con la vida laboral”. Sin embargo, todos los esfuerzos de Gomez y su familia, han traído frutos. Hoy, el joven cortador de caña está a poco tiempo de ser oficialmente doctor, por eso orgulloso, compartió su historia con el mundo a través de las redes sociales.
La idea de Gomez con compartir su historia es motivar a otros jóvenes a tomar las decisiones correctas y no rendirse hasta alcanzar sus sueños, porque de no haber pensado así no estaría a punto de ser médico.