Mucha gente sabe que, una de las mejores formas de prevenir enfermedades infecciosas, es teniendo un sistema inmunitario fortalecido. Pero, en medio de esta pandemia de coronavirus que el mundo está viviendo, es fundamental tener en cuenta cuáles son las señales que envía el cuerpo cuando la inmunidad está baja y qué se debe para aumentarla.
¿Cómo saber si la inmunidad está baja?
La baja inmunidad es más común en las personas de edad avanzada y en aquellas que con enfermedades crónicas, como diabetes y presión arterial alta. Debido a estos indicativos, este grupo de personas son consideradas de alto riesgo. No obstante, esto no quiere decir que el resto de individuos no vayan a tener una inmunidad lo suficientemente alta como para que su organismo se pueda curar rápidamente de un contagio de la covid-19.
Por lo tanto, si eres de ese tipo de persona que siempre está enferma, debes saber que esta es una señal clara de que tu cuerpo está desequilibrado. Algunas de las dolencias que suelen aparecer cuando la inmunidad es baja son el herpes, la candidiasis, la gripe y el resfriado, algunas veces durante el año.
Cómo aumentar la inmunidad para protegerse del coronavirus y otras enfermedades
No llega con tomar medidas para tratar el herpes, la candidiasis, la gripe y el resfriado. También es necesario evitar que estas enfermedades vuelvan a aparecer, fortaleciendo tu sistema inmunológico. Aprende cómo hacer llevar a cabo estas actitudes importantes en tu rutina diaria.
Dormir bien
Dormir bien significa dormir lo suficiente para que tu cuerpo tenga tiempo de recuperarse del desgaste que ha realizado a lo largo de todo el día. Ten presente que es más importante que tengas un sueño profundo y estimulante que durante largas horas. Recuerda: la calidad es más importante que la cantidad de sueño.
El sueño, aunque no lo creas, es tan importante para fortalecer la inmunidad, puesto que es mientras estás en reposo absoluto que tu cuerpo hará una “limpieza” interna, eliminando las toxinas que has acumulado durante el día y devolviendo las capacidades a tus órganos y músculos para las actividades del día siguiente.
Alimentarse bien
Al igual que dormir bien, es fundamental alimentarse de manera saludable. Es por medio de los alimentos que proporcionarás a tu cuerpo todos los nutrientes necesarios para fortalecer el sistema inmunológico.
Por ello, es importante comer de 3 a 5 porciones de fruta durante todo el día, al menos 2 porciones de ensaladas, además de carbohidratos enteros, semillas, legumbres, yogures, frutos oleaginosos (nueces y nueces), grasas saludables (pescado, aceite de oliva, etc. aguacate, coco), fuentes de proteínas y fibra.
Es fundamental evitar comer tantas calorías vacías como es el caso de dulces industrializados y comidas rápidas. Estas interfieren en el funcionamiento de tu cuerpo, desequilibran tus sistemas, abriendo espacios para la aparición de tus enfermedades.
Tomar el sol
El sol es la principal fuente de vitamina D para el organismo, es por eso que esta vitamina es tan vital para fortalecer el sistema inmunológico. Entonces, cuando tengas la oportunidad de estar en la calle, hazlo, preferiblemente, en los momentos más suaves, y estate al menos 15 minutos tomando el sol para absorber esta vitamina. Lo ideal es tomar 1 hora de sol, por lo menos.
Pero ten siempre presente que esta vitamina no se absorberá si no te estás alimentando de forma saludable. Debes cumplir con todos los consejos para que el fortalecimiento de tu cuerpo sea eficiente.
Descansar la mente
El estrés y la ansiedad del día a día pueden llevar a enfermar a una persona de verdad, por el hecho de que estos problemas disminuyen la inmunidad de esta.
Teniendo esto en cuenta, es muy importante saber lidiar con estas situaciones para evitarlas lo máximo posible, y no dejarse llevar a un desequilibrio emocional cuando ocurren.
Para ello, resérvate un tiempo libre durante el día solo para ti, deja de trabajar en exceso y verás cómo todo se pondrá en orden para que tengas una buena salud.