Para muchas personas, comprar una pieza de cuero es sinónimo de elegancia y garantía de durabilidad. Puede ser una chaqueta, pantalón, bolso, cinturón o zapato, el hecho es que cualquiera de estas piezas, cuando está hecha de cuero genuino, necesita un cuidado especial para ser preservada durante el tiempo esperado. Por lo tanto, lo ideal es saber cómo limpiar el cuero para que la inversión valga la pena durante muchos años.
4 Consejos para limpiar piezas de cuero
Por más resistente que sea, el cuero es un material que necesita hidratación para no sufrir grietas de sequedad. Además de este cuidado, debes usar los productos correctos o puedes causar manchas en el material. Mira cómo limpiar el cuero de la manera correcta, de acuerdo con cada tipo de cuero.
1. Cuero anilina
Este tipo de cuero es más común en sofás y otros muebles, pero se puede usar para piezas como bolsos. Tiene características más naturales, no contiene colorantes y absorbe más humedad porque es más aterciopelado.
Para limpiar este tipo de cuero, usa un cepillo de cerdas suaves, alcohol, algodón, desengrasante para cuero (si es necesario) e hidratante para cuero.
- Comienza utilizando el cepillo para eliminar todo el polvo de la pieza;
- Luego haz una mezcla con 150 ml. de alcohol y 2 litros de agua;
- Humedece el algodón en esta mixtura y aplícalo en toda la pieza, removiendo con un paño seco y suave, en seguida;
- Si es necesario usar el desengrasante de cuero, aplica también una capa muy delgada del producto con algodón;
- Finalmente, usa un paño suave para aplicar la crema hidratante al cuero, frotando suavemente para pulir la pieza. Tras eso, estará pronta.
2. Cuero liso
El cuero liso es uno de los tipos más comunes y requiere menos esfuerzo para su manutención. Necesitarás un jabón suave, un paño suave, alcohol, crema hidratante de cuero o, si no tienes este producto, puedes usar vaselina o aceite de almendras.
- El primer paso es utilizar el paño suave para eliminar el polvo de la pieza;
- Después, mezcla 10 ml. de jabón suave y 25 ml. de alcohol en 2 litros de agua;
- Aplica esta solución en toda la pieza con otro paño suave que no tenga polvo;
- Retira el exceso de líquido de la pieza con un paño seco y termina aplicando el hidratante.
3. Ante o gamuza
La gamuza es un material con un toque suave y muy delicado. Por eso, jamás podrás usar líquidos para limpiarla. Lo ideal es que compres una pieza impermeabilizada para impedir el contacto con los líquidos.
Para limpiar piezas de gamuza, usa solo un paño limpio y esponjoso y un cepillo de cerdas muy suave, aplicando sobre la pieza en la dirección de las fibras. Si necesitas eliminar cualquier mancha, lo ideal es llevar la parte a un especialista en lugar de correr el riesgo de empeorar la situación con soluciones caseras.
4. Cuero blanco
Cualquier tipo de pieza blanca, incluso si no es de cuero, necesita un cuidado y atención especial. Incluso un poco de suciedad parecerá como si fuera enorme. Para evitar manchas y mantener la buena apariencia de la pieza, lo ideal es limpiarla semanalmente, especialmente si se usa con frecuencia.
Para limpiar piezas de cuero blanco o crema clarita, utiliza jabón de coco, agua, esponja suave y un hidratante para cuero o vaselina. Esta vez, no emplees aceite de almendras porque su color natural puede manchar el cuero blanco. Un consejo especial para hacer una crema hidratante casera es mezclar a partes iguales el agua y la leche.
- Comience mezclando un poco de agua con jabón de coco;
- Aplica esta mezcla sobre la pieza con una esponja suave;
- Remueve el exceso con un paño seco, limpio y suave, y termina aplicando una de las opciones de hidratante.
Si tienes alguna duda o recelo al aplicar un producto al cuero, no lo hagas. Lo mejor que puedes hacer es buscar a un especialista en cuero para que este pueda aplicar algún producto de uso profesional y de la manera correcta.