En algunas culturas, ingerir grillos, escarabajos, hormigas o saltamontes, entre otros insectos es algo muy común. Otras civilizaciones ven a estos insectos como una plaga que trae suciedad y/o enfermedades. Cierto es que un reciente estudio ha revelado que comer grillos es bueno para salud.
Comer grillos puede mejorar tu salud
En diversos países de Oriente, comer grillos es algo tan habitual como consumir pollo en Occidente. Estos bichitos le dan un toque picante y crujiente a los platos, además de contener mucha proteína. Dicha sustancia es la que beneficia la mejora de las bacterias naturales en el intestino (microbia). Asimismo, permite la reducción de la hinchazón del cuerpo, según una investigación llevado a cabo por el Instituto de Estudios Ambientales de la Universidad de Wisconsin-Madison, en Estados Unidos.
En el ensayo participaron 20 voluntarios, los cuales se sometieron a un régimen en el que se incluyeron insectos durante 15 días en el desayuno. Los investigadores hicieron un polvo a base de insectos grandes. Éste se transformó en magdalenas o batidos para darle un aspecto más apetitoso que el de un simple bicho.
Tras las 2 semanas, lo que se pretendía comprobar era el efecto de comer grillos sobre el organismo ya que contienen quitina. Ésta es una fibra dietética bien distinta a la que se haya en frutas y verduras.
Lo que se observó en los 20 participantes, todos ellos sanos, es que la enzima metabólica de la salud intestinal se había incrementado. La bacteria buena bifidobacterium animalis fue una de ellas. También se produjo una reducción en cuanto a la hinchazón en la sangre TBF-alfa. Ésta está muy unida a signos del bienestar, ya sean depresión o cáncer.
Cabe destacar que la quitina es un alimento microbiano, el cual activa el aumento de bacterias beneficiosas para el organismo. A éste también se le puede llamar probiótico.
Testimonios del experimento
Valerie Stull, la autora principal del estudio, destacó que comer grillos “es una práctica que está ganando popularidad en Europa y Estados Unidos como fuente de proteínas sostenibles, en comparación al ganado tradicional.” Según Stull, “los estadounidenses deben considerar los grillos como un alimento potencialmente útil que contiene nutrientes y fibras importantes que podrían tener beneficios para nuestra salud, en general.”
Valerie también destacó que, a pesar de que los datos acerca de los beneficios de comer grillos son buenos, es necesario seguir investigando.
Ésta, igualmente, resaltó que “hay mucho potencial sin explotar cuando se trata de utilizar insectos comestibles”. Estos son muchos y cuando se cultivan tienen la capacidad de aportar proteínas de alta calidad. Y lo mejor de todo es que el impacto sobre el medio ambiente es inferior al que produce el ganado tradicional. Asimismo, “necesitan menos alimento, tierra y agua para crecer.” Por lo tanto, se producen muchos menos gases debido al efecto invernadero.
Si comer insectos te da asco, cierra los ojos y piensa que son otra cosa. Quizás una vez que los pruebes, adores su sabor y te animes a incluirlo en tu dieta.
Eso sí, ten cuidado de no tomar uno de los insectos más peligrosos del mundo.
Consejo final:
Recuerda que los datos expuestos en este artículo son meramente informativos. Estos nunca substituyen a la consulta con un especialista. Por tanto, ante de empezar a ingerirlo es aconsejable que visites a tu médico. Éste te dirá si los grillos y demás bichitos son buenos para tu caso en concreto.
Para acabar, no dejes de ver el siguiente vídeo donde se exponen 12 insectos que se pueden comer.
