Se denomina “Gaudete et Exsultate, sobre el llamado a la santidad en el mundo actual”. En esta exhortación, el papa Francisco presenta distinciones y definiciones para enriquecer la reflexión sobre la santidad y su importancia. Lo que sigue son 5 citas clave de la llamada del Papa a la santidad. Todas han sido extraídas de la exhortación publicada por el Vaticano.
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5 Citas clave de la llamada del Papa a la santidad
La exhortación está dividida en 5 capítulos. El primero es El llamado a la santidad. El segundo, Dos sutiles enemigos de la santidad. Le siguen A la luz del maestro y Algunas notas de la santidad en el mundo actual. Finalmente, el último capítulo es Combate, vigilancia y discernimiento. Aquí se ofrecen 5 citas clave de la llamada del Papa a la santidad, una por capítulo.
Todos están llamados a la santidad
Para ser santos no es necesario ser obispos, sacerdotes, religiosas o religiosos. Muchas veces se tiene la tentación de pensar que la santidad está reservada solo a quienes tienen la posibilidad de tomar distancia de las ocupaciones ordinarias, para dedicar mucho tiempo a la oración. No es así. Todo el mundo está llamado a ser santo viviendo con amor y ofreciendo el propio testimonio en las ocupaciones de cada día, allí donde cada uno se encuentra.
¿Eres consagrada o consagrado? Sé santo viviendo con alegría tu entrega. ¿Estás casado? Sé santo amando y ocupándote de tu marido o de tu esposa, como Cristo lo hizo con la Iglesia. ¿Eres un trabajador? Sé santo cumpliendo con honradez y competencia tu trabajo al servicio de los hermanos. ¿Eres padre, abuela o abuelo? Sé santo enseñando con paciencia a los niños a seguir a Jesús. ¿Tienes autoridad? Sé santo luchando por el bien común y renunciando a tus intereses personales. (GE14)
Cuidado con el gnosticismo actual
Cuando alguien tiene respuestas a todas las preguntas, demuestra que no está en un sano camino y es posible que sea un falso profeta, que usa la religión en beneficio propio, al servicio de sus elucubraciones psicológicas y mentales. Dios supera infinitamente a todos. Siempre es una sorpresa y no son las personas las que deciden en qué circunstancia histórica encontrarlo, ya que no depende del hombre determinar el tiempo y el lugar del encuentro. Quien lo quiere todo claro y seguro pretende dominar la trascendencia de Dios. (EG41)
Cuidado con el consumo hedonista
Otra de las citas clave de la llamada del Papa a la santidad habla del consumismo hedonista. Éste puede jugar una mala pasada porque en la obsesión por pasarla bien la gente termina, excesivamente, concentrándose en uno mismo. También en sus derechos y en esa desesperación por tener tiempo libre para disfrutar. Será difícil que el hombre se ocupe y dedique energías a dar una mano a los que están mal si no cultiva una cierta austeridad, si no lucha contra esa fiebre que se impone la sociedad de consumo para vender cosas, y que termina convirtiendo en pobres insatisfechos a que quieren tenerlo todo y probarlo todo.
También el consumo de información superficial y las formas de comunicación rápida y virtual pueden ser un factor de atontamiento que se lleva todo el propio tiempo y aleja de la carne sufriente de los hermanos. En medio de esta vorágine actual, el Evangelio vuelve a resonar para ofrecer una vida diferente, más sana y más feliz. (GE108)
Nunca mires desde arriba
No hace bien mirar desde arriba, colocarse en el lugar de jueces sin piedad, considerar a los otros como indignos y pretender dar lecciones permanentemente. Esa es una sutil forma de violencia. San Juan de la Cruz proponía otra cosa: «Sea siempre más amigo de ser enseñado por todos que de querer enseñar aun al que es menos que todos».
Y agregaba un consejo para tener lejos al demonio: «Gozándote del bien de los otros como de ti mismo, y queriendo que los pongan a ellos delante de ti en todas las cosas, y esto con verdadero corazón. De esta manera, vencerás el mal con el bien y echarás lejos al demonio y traerás alegría de corazón. Procura ejercitarlo más con los que menos te caen en gracia. Y sabe que si no ejercitas esto, no llegarás a la verdadera caridad ni aprovecharás en ella» (GE117)
La importancia del discernimiento
Hoy día, el hábito del discernimiento se ha vuelto particularmente necesario. Porque la vida actual ofrece enormes posibilidades de acción y de distracción, y el mundo las presenta como si fueran todas válidas y buenas. Todos, pero especialmente los jóvenes, están expuestos a un zapping constante. Es posible navegar en dos o tres pantallas simultáneamente e interactuar al mismo tiempo en diferentes escenarios virtuales. Sin la sabiduría del discernimiento pueden convertirse, fácilmente, en marionetas a merced de las tendencias del momento. (GE 167)
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El Papa Francisco termina diciendo “Espero que estas páginas sean útiles para que toda la Iglesia se dedique a promover el deseo de la santidad. Pidamos que el Espíritu Santo infunda en nosotros un intenso anhelo de ser santos para la mayor gloria de Dios y alentémonos unos a otros en este intento. Así compartiremos una felicidad que el mundo no nos podrá quitar.”
Además de estas citas clave de la llamada del Papa a la santidad, puedes conocer el texto íntegro en el siguiente video.
