Las pirámides egipcias son obras increíbles de la humanidad. Son tan increíbles que siguen en pie, mostrando su asombrosa forma y tamaño, incluso después de casi 5.000 años de su construcción.
Todavía hay mucho misterio sobre las pirámides, no sólo las de Egipto, sino también las de otras partes del mundo. Por ejemplo, los arqueólogos y científicos siguen sin saber cómo se construyeron, ya que en aquella época no existían las tecnologías actuales.
Pero lo que ya no es un misterio y sigue impresionando a todo el mundo es el aspecto que tenían las pirámides egipcias en la época en que se construyeron. El pueblo egipcio sí que sabía hacer monumentos impresionantes.
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En aquella época, hace casi 5.000 años, las pirámides egipcias no tenían el aspecto destruido que tienen hoy, con partes de sus piedras rotas y con ese color marrón, arcilloso.
A lo largo de los años, muchos vándalos y bandidos entraron en las pirámides para robar lo que había en su interior.
Además, mucha gente quiso subir a la cima de las pirámides y, con el tiempo, sus piedras se desgastaron y se rompieron en astillas, dejando el aspecto descuidado.
Es una pena que haya tanta gente en este mundo sólo para destruir en lugar de aportar algo bueno. Quizá por eso los “dioses astronautas” nunca volvieron a la Tierra y ayudaron a los humanos con su inigualable tecnología.
Cuando se terminaron de construir las pirámides de Egipto, eran como un atisbo del paraíso, transmitían mucho poder imponente.
En aquella época, las magníficas construcciones estaban completamente revestidas de blanco, irradiando la luz del sol del desierto. Encima, un ribete dorado les daba un aspecto aún más hermoso, provocando la admiración de todo el pueblo del Antiguo Egipto.
Esto se debe a que, supuestamente, las pirámides estaban recubiertas de fina piedra caliza blanca, según un profesor adjunto del Instituto Checo de Egiptología. Mohamed Megahed afirma que el revestimiento hacía que las pirámides tuvieran un aspecto liso y pulido, muy distinto al que tienen ahora.
Se necesitó mucha arenisca para recubrir estas pirámides. Los Museos Nacionales de Escocia afirman que sólo para la Gran Pirámide de Guiza se utilizaron 6,1 millones de toneladas de este material.
Desgraciadamente, gran parte de ese material ha desaparecido hace tiempo. Supuestamente, la arenisca blanca comenzó a extraerse cuando Tutankamón estaba en el poder, entre 1336 a.C. y 1327 a.C.
Además, un terremoto en 1303 probablemente también aflojó la piedra caliza, y otros gobernantes egipcios hicieron reutilizar las cajas para diversos proyectos de construcción.
¿No era precioso? Qué bien que existan científicos y arqueólogos que estudien la historia y nos permitan acceder a esta información que revela tanto sobre la humanidad.
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