Un joven de 25 años llamado Byron, oriundo de Gloucester, Inglaterra, se encontraba en una fuerte depresión luego de que la mujer que amaba lo abandonara. Byron había caído en el alcohol, y desde entonces, su vida había perdido todo sentido. No encontraba razones para seguir luchando, de manera que decidió acabar con su vida.
Fue así que Byron planeó su muerte. Buscó una soga para ahorcarse en el sótano de su casa. Ya no había vuelta atrás. La decisión había sido tomada. Sin embargo, el joven había decidido dejarle una carta de despedida a su familia. Borracho y en el punto más alto de su depresión, Byron comenzó a escribir, hasta que sintió un ruido extraño alrededor.
Cuando levantó la mirada, su perro se encontraba en la misma habitación masticando algo que llamó la atención de Byron. Al acercarse y abrirle el hocico, después de forzar un poco a su mascota, finalmente Geo, el perro, soltó lo que trituraba. Para sorpresa de Byron, Geo se había comido la soga con la que Byron planeaba suicidarse. ¡Al ver esto, Byron entró en razón!
De esta manera, Geo, este amigo peludo, el mejor amigo de Byron, evidentemente, salvó la vida de su dueño.
Según Byron, este evento demuestra un hecho fundamental: los perros tienen una gran intuición, y fue eso y la fidelidad propia que los caracteriza, lo que le salvó la vida a Byron.
Hoy este joven ha decidido recuperarse y su vida ha vuelto a la normalidad. Lamentablemente, el amigo peludo fue diagnosticado con un cáncer y no lo pudo vencer, así que este angelito de cuatro patas, ya no está en este mundo.
Pero son muchos, muchos los canes que hoy siguen salvando la vida. Muchas son y seguirán siendo las historias de estos héroes disfrazados de perritos. ¡Comparta con nosotros la suya y envíe este artículo a sus amistades! Le alegrarás el día.
A continuación compartimos el testimonio original (inglés) de Byron: