Entre los gastos fijos y principales de un hogar, la comida es uno de ellos. Además de que sea necesario alimentarse para subsistir, también entra en juego que existe una amplia gama de productos deliciosos que se pueden adquirir para hacer platos realmente exquisitos. Pero, si no se controla lo que se compra, al final de mes, el dinero que se desembolsa en la comida puede ser bastante. Asimismo, se debe tener en cuenta la importancia de consumir productos que sean sanos. Por ello, es bueno tener una planificación y seguir unas pautas para conseguir alimentarse de manera saludable y económica.
Cómo alimentarse de manera saludable y económica
Aunque pueda parecerte increíble, en ocasiones, la comida puede llegar a suponer casi el 40% de los gastos de una casa al mes. Si se compara con lo que se aconseja destinar al alquiler, el 30%, es un desembolso bastante elevado.
De ahí, la importancia de buscar alternativas que sean más baratas. Eso sí, sin dejar de comer de manera balanceada y sana.
Substituye carnes por proteínas vegetales
El pescado y la carne, por lo general, son los ingredientes más caros. Luego, hacer un cambio y probar alimentos vegetarianos durante la semana hará que reduzcas los costos en la compra. Asimismo, cabe la posibilidad de substituir la proteína animal por vegetal y implantar en tu menú un día a la semana sin carne.
Compra un pollo entero
Al adquirir un pollo entero, estarás abaratando costos, dado que podrás aprovechar todas las partes de este. Del mismo, podrás sacar dos pechugas, dos muslos, las piernas, las alas y los huesos (huacal) para darle sabor a un caldo.
Lo que no vayas a usar en el momento, lo puedes congelar e ir consumiéndolo a medida que lo desees.
No tires nada
Desperdiciar la comida es un gran error, y lo peor que puedes hacer. Para evitar tener que llegar a este punto, compra únicamente lo que vayas a comer. En caso de que compres algo de más, puedes congelar los alimentos que no vayas a ingerir en el momento.
Consume frutas y verduras congeladas
Todo y que muchas personas son reticentes a las frutas y verduras congeladas y las subestiman, estas ya están lavadas, cortadas y listas para consumirlas. Estas son iguales de buenas. Lo único que debes hacer es evitar añadir azúcar, sal o grasas a estas cuando las vayas a ingerir.
Además, normalmente, son más económicas que las frescas.
Evita comprar aquello que no hayas apuntado en la lista
Antes de salir al supermercado, haz una lista para saber cuáles son los artículos que te hacen falta. No adquieras nada que no esté anotado en la lista, ni vayas a hacer las compras cuando tengas hambre, porque esto hará que compres más y, sobre todo, alimentos que no son saludables.
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Para finalizar, en el próximo vídeo puedes conocer unos valiosos consejos para ahorrar en la lista de la compra.
