Sabemos que los perros son animales muy especiales. El hecho de que vivan en manada nos dice mucho de su instinto socializador. Al igual que el se humano, los perros necesitan del grupo social, por eso nos adoptan como parte de ellos.
Recientemente se ha dado a conocer la historias de una relación de amistad realmente conmovedora entre dos perritos, llamados Sammie y Simon. Estos perros fueron llevados a la Clínica Paws & Claws de Carolina del Sur, en Estados Unidos, donde se conocieron. Ambos estaban muy enfermos.
De hecho, Simon que tenía apenas 1 año de edad cuando fue ingresado, había sufrido maltratos y además padecía sarna. En cambio, Sammie, de apenas 4 meses, sufrió una suerte mucho peor. Su amo le disparó en la cabeza, lo pintó con spray de colores, lo amarró a la defensa posterior de su auto y lo arrastró por la calle. ¿Qué clase de bestia anda disfrazada de persona por allí?
Punto aparte, me parece que las personas que le hacen estos daños a los animales debería recibir condena a prisión, porque si alguien no es capaz de mostrar misericordia por un ser indefenso, es capaz de cosas mucho peores contra sus iguales. Es un criminal en potencia, y requiere mínimamente de rehabilitación psiquiátrica inmediata.
Desde que se vieron, estos perritos se han convertido en buenos amigos. Simon se acercó a Sammie y le extendió su pata en signo de apoyo y consuelo La escena se ha hecho viral.
Dl Dr. Mike Sauers informó a la revista People que los perros mejorarán, aunque el más agraviado requerirá no solo de varias cirugías sino de una rehabilitación emocional, como consecuencia de los traumas sufridos.
Mire el siguiente vídeo:
Ayúdanos a difundir esta historia. Necesitamos que la gente comprenda que la violencia debe detenerse, que es tiempo de ayudar, curar y construir.